El Ayuntamiento dispone de un plan de mantenimiento a través del que se procede a la anotación de todas las incidencias y al arreglo de una fuente cuando se estropea, "el problema es que muchas llevan años sin funcionar y nadie se ha preocupado por su reparación anteriormente, sobre todo las ornamentales, y para estas hay que aplicar un presupuesto especial y un plan para su posterior conservación", comenta el concejal. En cuanto a las fontanas ornamentales, en total, la ciudad tiene más de una veintena catalogadas, unas cuantas que no funcionan, como la de la Plaza de Fernando III, la del Parque de la Carretera de Villalpando, o la del Parque de San Alfonso, esta última con una avería en la bomba. Un caso concreto es la de San Martín, que lleva sin funcionar desde hace muchos años, el problema es el cuadro eléctrico, que se estropea al mojarse.

Uno de los primeros casos en este ámbito que abordó el concejal de Urbanismo fue el arreglo de la fuente de La Marina, que tenía problemas de filtraciones, en las válvulas y en las tuberías. Los planes del Ayuntamiento pretenden otorgar una imagen más positiva de las vías públicas, pero también busca aportar más comodidad a la propia población, "es necesario que todo lo que se encuentra en las calles funcione correctamente, si una fuente está parada no da buena impresión y es fundamental que se repare", comenta.