Otra de las propuestas realizadas el miércoles por Calvo Rosón fue la promulgación de una ley de reequilibrio territorial de rango superior "a los estatutos de autonomía, nunca a la Constitución". Y no tuvo empacho en dirigirse, sin mencionarlo, a los separatistas catalanes, "que dicen que España les roba. A nosotros sí que nos han robado, lo más valioso, las personas", arrancando, una vez más las ovaciones del público especialmente sensibilizado con las dificultades que atraviesa el mundo empresarial de la provincia que, a pesar de lo sugerido en el discurso de cierre por la directora general de Comercio de la Junta, Irene Núñez Martín, aún no logra ver la crisis "desde el espejo retrovisor" sino que la tiene muy presente. Finalizó el premiado con la Medalla a la Dedicación Empresarial con una recomendación a los emprendedores del futuro, "sed creativos, sed rebeldes".
Un auténtico chaparrón que tenía como destinatarios inmediatos los colocados en primera fila de autoridades como la mencionada directora general como única representante de la Junta; la presidenta de la Diputación, que prometió apoyo pero eludió ahondar en la polémica, junto al vicepresidente de la institución Juan Dúo, el teniente de alcalde del Ayuntamiento, Antidio Fagúndez, el subdelegado del Gobierno, Jerónimo García Bermejo o la senadora y portavoz del PP en el Ayuntamiento Clara San Damián, así como representantes de distintos grupos políticos municipales, entre otros.
