Los archivos ocultos de José Luis Coomonte se abren a los ciudadanos en una nueva muestra en el Museo de Zamora. "Coomonte, el dibujo infatigable" abre una ventana a una de las facetas menos conocidas del artista benaventano, como es la de pintor y dibujante. El visitante, a través de este viaje, podrá conocer el primero de los pasos que un autor tiene que dar antes de materializar una obra: el boceto. Las paredes de la sala expositiva se llenan con diferentes dibujos de obras tan icónicas como las rejas de la Diputación Provincial de Zamora o alguna de las cruces diseñadas para salir en la procesión de Jesús en su Tercera Caída.
El Museo de Zamora ha preparado en estrecha colaboración con José Luis Coomonte una muestra en la que se hace un repaso de su vida como artista. Dibujos que van desde los 12 años del autor hasta este 2017 se entremezclan en una instalación que, conscientemente, evita una estricta secuencia cronológica en beneficio del contraste entre distintas propuestas, la variación infinita en el tratamiento de motivos recurrentes y la insistencia en el análisis de un mundo sensible. "El visitante tendrá que prestar especial atención a las fechas ocultas en los dibujos para conocer un poco más de mi obra", ha detallado el artista.
La exposición es una propuesta de carácter antológico y exclusivo en la que se ofrecen dibujos y bocetos que el escultor ha conservado con mimo entre sus archivadores. "Yo lo que veo aquí son ventanas, ancho por alto; un espacio lleno de ventanas que se abren para conocer lo que hay detrás de cada una de mis obras", ha explicado José Luis Coomonte durante la inauguración de la exposición.
Durante la apertura de la muestra, en la que Alberto Castro acompañó a José Luis Coomonte, el artista aseguró estar ilusionado con la oportunidad brindada por el Museo de Zamora. "Aunque mi faceta más reconocida ha sido siempre la escultura, no debemos de olvidar que el dibujo es la materia troncal de las artes plásticas", ha concluido el autor.
