A todos les une la pasión por los idiomas, que para nada está reñida con la elección elegida en Bachillerato. De hecho, la mitad de estos alumnos son de ciencias y la otra mitad de letras o ciencias sociales. Un grupo de 19 jóvenes acaba de finalizar el primer curso del Bachillerato de Investigación y Excelencia (BIE) en Idiomas, que se imparte desde este curso en el IES María de Molina.

"Me animé a estudiar este bachillerato porque me gustan los idiomas y creo que son importantes a la hora de encontrar trabajo y buscar salidas profesionales, tanto en España como en el extranjero", asegura Guillermo Sánchez, a quien le gustaría estudiar una ingeniería.

"Es una carga de trabajo extra para el profesorado, pero se vive esa misma ilusión que desprenden los alumnos, así que se lleva muy bien", confiesa Begoña Pascual, coordinadora de este bachillerato, quien destaca el uso de las nuevas tecnologías "casi constantemente, para utilizar estos recursos en relación a una nueva didáctica".

Así, es habitual el disponer de ejercicios a través de Internet o asistir a videoconferencias o seminarios impartidos por las facultades que la Universidad de Salamanca tiene en el Campus Viriato de Zamora sobre temas tan variados como neurociencia, propiedad intelectual, Europa, estadística o los medios de comunicación. "Tenemos contacto con un instituto de Finlandia, con el que nos conectamos para hablar en inglés y aprender de sus costumbres", añade Mónica González, una estudiante llegada de Fresno para estudiar este bachillerato.

Además de la relación con la Universidad de Salamanca a través de los seminarios, estos estudiantes acuden a la Escuela Oficial de Idiomas para sus clases especiales de inglés o de iniciación al alemán. "La relación con ellos es muy satisfactoria, intentamos reforzar sus contenidos orales y sus destrezas a la hora de escribir, trabajando sobre todo las presentaciones", apunta Ángel Brioso, profesor de la Escuela de Idiomas.

Y es que este verano los alumnos ya tendrán que empezar a dar forma a los proyectos de investigación que serán materia del 2º curso. Desde la historia del diplomático Ángel Sanz Briz en el Budapest de 1954 hasta el trabajo de la arquitecta japonesa Kazuyo Sejima o realizar una encuesta con el deporte como protagonista, los alumnos deberán defender luego sus propuestas en otro idioma, al que dedican más horas semanales que sus compañeros del bachillerato ordinario. "Disponen de 35 periodos lectivos a mayores cada semana, que se reparten en más clases de inglés, iniciación al alemán en la Escuela de Idiomas o las actividades que se realizan en colaboración con la USAL", resume la coordinadora.

"La experiencia de este primer año ha sido muy positiva, estoy muy animado para el año que viene", valora Emilio Ferrero, otro alumno de este grupo.

Estudiar este bachillerato supone para los alumnos otras ventajas como ser portadores de la tarjeta de la USAL, que les permite acceder a las instalaciones y servicios de la universidad o disponer de un documento acreditativo de la formación recibida en la universidad, a través de los seminarios y el proyecto de investigación, que les puntuará a la hora de concesión de becas de colaboración en tareas de investigación en departamentos. "Además, desde la Consejería de Educación se está estudiando la gratuidad del primer año en la universidad para los mejores proyectos de los alumnos", adelanta el director del centro, Carlos Pérez, quien asegura que gracias a este BIE "hemos encontrado alumnos excelentes, muy brillantes y, sobre todo, comprometidos con el estudio".

Proceso de selección

Los interesados en unirse a esta modalidad de estudio todavía están a tiempo de enviar su solicitud para el curso 2017-2018 hasta este martes. Los requisitos iniciales que se exigen son haber obtenido un 7 de nota media en la ESO, haber aprobado todo en la convocatoria de junio y presentar un escrito "en el que reflejen razones y expectativas para este bachillerato, que también lo puede elaborar su tutor de 4º de la ESO, donde describiría sus actitudes", sugiere Pascual.

El siguiente paso es participar en el proceso de selección, donde se le realiza una entrevista personal para ver la madurez del alumno. También se valorarán sus notas en las asignaturas de idiomas y las actividades que haya realizado relacionadas con competencias lingüísticas -desde intercambios hasta certificados oficiales de idiomas- para poder hacerse con una de las 25 plazas que ofrece el IES María de Molina para el próximo curso.