Preparar con antelación el viaje al extranjero por si es necesario ponerse alguna vacuna o adoptar otro tipo de prevenciones sanitarias es fundamental, ya que en ocasiones se pueden necesitar hasta ocho semanas para completar el tratamiento. El calendario vacunal del viajero fue el objeto de la primera conferencia de la Semana Médica organizada por el Colegio de Médicos, que estuvo a cargo de Miguel Ángel González Roca, que es médico asesor en vacunas del laboratorio GSK (GlaxoSmithKline).

- ¿En qué aspectos ha centrado su conferencia?

-Repasar cuales serían las principales vacunas que estarían recomendadas para el viajero en relación al lugar de destino o el tipo de actividad. Hay una serie de recomendaciones generales a tener en cuenta por parte de cualquier viajero que vaya a otro país. También abordo de las vacunas y las enfermedades que se previenen con ellas. Y por último la prevención de la malaria en sí dependiendo de si el viajero va a una zona de malaria endémica.

- ¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de plantearnos un viaje?

-Es importante tener en mente que hay que asistir a una consulta del viajero o a un centro de vacunación internacional con un periodo de tiempo previo. Entre cuatro y ocho semanas sería lo ideal porque hay una serie de vacunas que dependiendo de la pauta vacunal estaremos hablando de cuatro semanas y otras de ocho. Por eso se recomienda al que se va a ir que no lo haga de la noche a la mañana, que es lo que suele ocurrir o con muy poquito tiempo.

- ¿Qué recomendaciones generales son importantes?

-Si necesita un botiquín, si es un grupo de riesgo (niños, embarazadas, personas mayores, personas con patologías médicas adecuadas, etcétera) o si se va a viajar a un lugar del mundo donde la actividad de los mosquitos es importante. Existe toda una serie de enfermedades que tienen que ver con las picaduras de los mosquitos o la mordedura de algún animal que pueda transmitir la rabia, etcétera. Y luego, ciertas precauciones con los alimentos o las prácticas sexuales. Una segunda parte tendría que ver con las enfermedades prevenibles con vacunas y la tercera parte estaría relacionada con la malaria, que no tiene una vacuna propiamente dicha, sino profilaxis de la malaria. Es un tratamiento, un fármaco, no es vacuna.

- Estamos oyendo hablar ahora de países con auténticos problemas por la malaria.

-Hay zonas determinadas como África o Sudamérica, son determinadas áreas a las que la recomendación es tomar un tratamiento preventivo.

- ¿Cuáles son las principales vacunas?

-Hay tres vacunas que son, por decirlo de alguna manera, obligatorias dependiendo del país, que son fiebre amarilla, polio y enfermedad meningocócica. Esas vacunas frente a esas tres enfermedades infecciosas sí son obligatorias dependiendo al país al que vayamos. Luego hay otras que son vacunas recomendadas, porque son patologías que tienen una incidencia elevada en determinados países con lo cual se deberían poner también. Y por último están las que serían vacunas de rutina, es decir, tener en cuenta si la persona tiene puestas todas las vacunas del calendario oficial o si necesita completarlo con alguna.

- ¿Se corre mucho riesgo si no se hace caso a la recomendación?

-Si. Y sobre todo entendiendo que el viajero internacional viaja por muchos motivos. Uno no va solo por ocio a un gran resort, que es la idea que mucha gente tiene, sino que los viajeros internacionales lo hacen por diferentes motivos. Por ocio obviamente pero también por motivos profesionales, cada vez más, por adopción, gente que va a buscar un niño fuera, los cooperantes e incluso la emigración.

- ¿Cómo afecta este último aspecto?

-Ha habido no hace tantos años atrás una población inmigrante importante y esa población inmigrante en un momento determinado vuelve a su país a ver s sus familiares y amigos con lo cual esa persona vuelve a estar en contracto con otro ambiente diferente al que está conviviendo. Y no es nada de extrañar que en este trasiego de un lugar hacia el otro traiga algo que es endémico, allí no le crea problemas pero puede traerlo con él y aquí sí plantearnos problemas. Cada vez hay más viajes internacionales también por motivos religiosos, ir una vez en la vida a la Meca, por ejemplo, lo que conlleva una gran afluencia de personas, una gran aglomeración donde determinadas enfermedades infecciosas son muy fáciles de transmitir.

- Da la impresión de que sí hay medios para que el viajero pueda irse al extranjero con todo en regla.

-Si, de hecho la página del portal de Salud de Castilla y León habla de las vacunas del viajero, establece donde están los centros de vacunación internacional, cuáles son las principales vacunas y las recomendaciones a tener en cuenta.