Los vecinos del barrio zamorano del Espíritu Santo convocaron ayer una paella altruista cuyos fondos fueron a parar a la familia que el pasado 2 de junio sufrió un inciendo en su vivienda. Durante el fuego los bomberos tuvieron que levantar parte del tejado para evitar que las llamas se propagaran, además de extraer ropa y otros artículos de la casa.