El laboratorio de Sanidad de Zamora realizó el pasado año 1.821 controles relacionados con la seguridad alimentaria y la sanidad ambiental, y fue el tercer centro de la comunidad con una mayor actividad, según el balance hecho público por la Junta de Castilla y León. La mayor actividad del laboratorio de salud pública de Zamora estuvo relacionada con el Plan nacional de investigación de residuos en productos de origen animal (PNIR, donde se encuadra, por ejemplo, la presencia de clembuterol en la carne), al que corresponden nada menos que 1.376 análisis, un altísimo porcentaje del total.

En menor medida se realizaron análisis de aguas, 282, alimentos, 126 y de otras materias, 37.

Cada uno de estos ensayos conlleva muchas veces varias determinaciones analíticas y de hecho el laboratorio de Zamora ha realizado 9.541, con 8.372 correspondientes al PNIR.

Los laboratorios de control oficial están ubicados en cada una de las provincias de la comunidad y son los encargados de realizar los servicios analíticos de control oficial de productos alimenticios, regulados por el Reglamento (CE) 882/2004, de 29 de abril, sobre los controles oficiales efectuados, para garantizar la verificación del cumplimiento de la legislación en materia de piensos y alimentos y la normativa sobre salud animal y bienestar de los animales. Este reglamento establece normas generales para la realización de controles oficiales, a fin de comprobar el cumplimiento de las normas. Básicamente de lo que se trata es de prevenir, eliminar o reducir a niveles aceptables, los riesgos que amenazan directamente, o a través del medio ambiente, a las personas y los animales y garantizar prácticas equitativas en el comercio de alimentos, además de proteger los intereses de los consumidores, incluido el etiquetado y otras modalidades de información al consumidor.

Los laboratorios, designados por la autoridad competente para participar en el análisis de muestras oficiales, deben aplicar procedimientos autorizados internacionalmente o normas de funcionamiento basadas en criterios y emplear métodos de análisis que, en la medida de lo posible, hayan sido validados. Los laboratorios deben disponer, en particular, de equipo que les permita determinar correctamente el cumplimiento de normas, como los niveles máximos de residuos fijados por el derecho comunitario.

El cumplimiento de estos requerimientos determina que los laboratorios de control oficial, como responsables de los análisis de control oficial, tengan la obligación de estar acreditados de acuerdo con la norma de calidad.

En los últimos años, la evolución del número de muestras analizadas en los laboratorios de control oficial ha sido decreciente, reduciéndose desde 2010 a 2015 cerca de un 40%. En 2016 ha aumentado este número en un 10,8%.

La mayor parte de las determinaciones de Zamora corresponden a química analítica, 8.390 y en menor medida a microbiología analítica, 739 e instrumental, 412. De hecho, Zamora y León son las provincias de mayor carga analítica en esta área con respecto al total de Castilla y León (53,8% y 19,7% respectivamente). Es decir, que Zamora realiza más de la mitad de las determinaciones de química analítica de toda la comunidad. Es sin embargo, una de las pocas provincias sin analítica de orina de drogodependientes.