Los 43 Centros Municipales Integrados de la provincia, los antiguos comedores sociales, reciben este año una inyección económica de 400.000 euros por parte de la Diputación -50.000 más que el ejercicio pasado- para atender a los alrededor de 500 usuarios del medio rural que recurren a esta prestación. El servicio, que depende de forma directa de la institución provincial, contará con esta subvención para el mantenimiento y mejora de los denominados CEMI.

Los comedores sociales constituyen un medio básico no solo para proporcionar un servicio de comida caliente a las personas con necesidades económicas, sino para atender a todos aquellos vecinos de avanzada edad que no disponen de recursos o capacidad como para poder preparar la comida de forma autónoma. Los centros se convierten también en un punto de encuentro, reunión y de ocio para personas que, de otro modo, verían recortadas sus relaciones sociales.

La institución provincial apoya el programa social desde el año 2004 y, desde entonces, se han puesto en funcionamiento nuevos centros que proporcionan un menú más equilibrado a precios módicos en el ámbito rural. El objetivo es conseguir que las personas mayores que viven en los pueblos, a veces pequeños y alejados de la capital, tengan un servicio que implica mejorar su calidad de vida, su dieta y sus relaciones sociales con otras personas al margen de sus recursos económicos. En el momento actual, los centros están abiertos a todo tipo de usuarios.

Entre los Centros Municipales Integrados en funcionamiento se encuentran los de Figueruela de Arriba, Muelas del Pan, Cerezal de Aliste, Grisuela, Riofrío de Aliste, Samir de los Caños, Bercianos de Aliste, San Vicente de la Cabeza, Palazuelo de las Cuevas, Trabazos, Viñas, Brime de Urz, Micereces de Tera, Abraveses de Tera, Pobladura del Valle, San Cristóbal de Entreviñas, Cañizal, Guarrate, Fuentelapeña, Villaescusa, Villamor de los Escuderos, Porto, Lubián, Almeida de Sayago, Bermillo de Sayago, Fariza, Fresno de Sayago, Moral de Sayago, Roelos de Sayago, Villadepera, Ferreras de Abajo, Castronuevo de los Arcos, Granja de Moreruela, Manganeses de la Lampreana, Villafáfila, Villanueva del Campo, Almaraz de Duero, Montamarta, Corrales, Morales del Vino, Villaralbo, La Bóveda de Toro, Pinilla de Toro y Venialbo.

La inyección económica tiene forma de subvención para pagar los sueldos y la seguridad social del personal que atiende los comedores, además del servicio de catering y el suministro de víveres. La ayuda está supeditada a ayuntamientos con menos de 5.000 habitantes.