La situación del Duero a su paso por Zamora es más que preocupante. El río ha iniciado el mes de mayo con poco más de 30 metros cúbicos de agua por segundo de caudal, la cifra más baja al inicio del quinto mes del año de los últimos quince años según los datos que maneja la propia Confederación Hidrográfica. Es la causa de las escasísimas lluvias caídas durante el invierno y lo que va de primavera, estaciones que de momento vienen teniendo un carácter seco en la provincia de Zamora y en otras zonas por las que discurre el río.

La observación en tiempo real de la red de medidores indica que, en Zamora y a fecha de ayer, la cifra superaba por poco los 30 metros cúbicos o, lo que es lo mismo, 30.000 litros de agua por segundo. Son cantidades más propias del mes de agosto, cuando ya lleva varios meses sin llover en la provincia y en las zonas de la cabecera del río, que de mayo, cuando la primavera suele provocar crecidas en el caudal del Duero.

Lo que realmente preocupa es que, tradicionalmente y a partir del mes de mayo, el caudal del Duero empieza a decrecer hasta tocar mínimos en el mes de agosto. Ahora la situación de partida es tan grave que, realmente, es como si el río estuviera en pleno mes de agosto y no con todo el verano por delante, por lo que habrá que esperar para saber cómo evoluciona el caudal en las próximas semanas o meses. Lo que es innegable es que, si continúa esta tendencia, el Duero llegará al verano en unos niveles, prácticamente, nunca vistos.

Las aguas que en este momento lleva el río apenas corresponden al 25% de lo que es habitual durante el mes de mayo, cuando el caudal más habitual es el de 113,27 metros cúbicos por segundo. Sin embargo, esta es la media que arroja todo el mes, porque los caudales de los primeros días son tradicionalmente más elevados que los de finales de mes. De hecho, los 30 metros cúbicos por segundo que ahora lleva el río sí se han llegado a recoger hace pocos años a finales de mes, pero nunca a principios.

El nivel que marca el río también es alarmantemente bajo pues al paso por el puente de los Tres Árboles, lugar en el que la Confederación Hidrográfica tiene instalado el medidor, las aguas apenas ascienden 30 centímetros sobre el nivel del suelo. También es un dato más bajo del habitual ya que en mayo se roza el metro como término medio.

Por su parte, los embalses de la provincia de Zamora están a día de hoy al 50% de su capacidad, una cantidad bastante baja teniendo en cuenta el periodo del año actual. El año pasado, sin ir más lejos, los embalses de la provincia rozaban el 80% de su capacidad por estas fechas, lo que da una idea de la caída de las reservas de agua que se han registrado en apenas doce meses. Entre todos suman 897 hectómetros cúbicos de los 1.814 de capacidad.

Se espera que las lluvias anunciadas para los próximos días, tanto en Zamora como en las zonas de la cabecera de la cuenca hidrográfica, sirvan para paliar en parte la situación, que pese a todo no dejará de resultar alarmante. De hecho, la propia Confederación Hidrográfica del Duero ya apunta en sus previsiones que el caudal del río a su paso por la ciudad está ahora en tendencia alcista.