El entorno de la ermita de Nuestra Señora de Los Remedios no pasa por su mejor momento. Los restos de suciedad de la celebración de Semana Santa, unidos a la maleza que se concentra en la zona debido a la falta de mantenimiento, ofrecían durante estas últimas jornadas una pésima imagen de uno de los templos románicos de la capital que se encuentra incluido en las diferentes rutas turísticas de la capital. El poco uso que se le da a este edificio, apenas suscrito a la romería de La Hiniesta, es la principal razón del estado de abandono que sufre en sus propias carnes. No obstante, la situación de Los Remedios no ha sido nunca la deseada desde su restauración, precisamente por esta misma razón.

Los ciudadanos que durante estos días se han acercado al entorno de la ermita de Nuestra Señora de Los Remedios han podido comprobar el estado que presenta el patio exterior, con acumulación de suciedad derivada de los restos del botellón y de la falta de mantenimiento debido a su escaso uso. Este ha sido el último problema de un edificio que no termina de encontrar el respeto de los vándalos. A lo largo de los últimos años, el templo ha sufrido el derribo de sus vallas o puertas, el lanzamiento de vidrios e incluso pintadas. Acciones todas ellas que afean el trabajo de restauración realizado hace apenas unos años y que recuperó para la ciudad de Zamora uno de los edificios que se encontraba en una situación más que complicada derivada del paso de los años.