Tan solo les ha hecho falta cuatro minutos para convencer de que su proyecto es más que viable. Las estudiantes del colegio Nuestra Señora del Rocío, Sara Gutiérrez y Alba Moreno, han captado la atención de varios inversores con su proyecto: una plataforma multimedia para luchar contra el acoso escolar. Su oportunidad la han tenido en la final de la iniciativa "Incubadora de Proyectos", promovida por la Fundación La Caixa y que esta semana celebraba la final, donde las zamoranas han competido con otros nueve grupos de emprendedores, llegados de diferentes partes del país.

"Condensar en tan poco tiempo nuestra idea para presentarla a posibles inversores fue algo complicado y tuvimos que ensayar mucho", reconoce Sara Gutiérrez. Los consabidos nervios quedaron atrás cuando las dos estudiantes subieron al escenario para explicar a los empresarios en qué consistía su iniciativa, eminentemente social y que se centra en erradicar el acoso escolar en las aulas.

Para este ambicioso objetivo han desarrollado una plataforma que será la herramienta principal de los agentes de prevención, alumnos voluntarios con una formación especializada -su proyecto lleva por nombre "Bullying agents"- que les ayuda a detectar determinadas conductas de acoso y actuar de manera correcta tanto con las víctimas como los acosadores, implicando también a profesores del centro y padres de los alumnos. "También estaríamos conectados con profesionales como psicólogos, pedagogos o abogados", enumera Gutiérrez, quien añade que la plataforma también contará con la posibilidad de realizar denuncias anónimas, un chat online "o un muro para que los profesores de diferentes centros pongan en común sus experiencias y cómo han solucionado los casos de acoso escolar que se les han presentado", pone como ejemplo.

Con estos mimbres, tras la puesta en común de los proyectos de los diez equipos ganadores de la primera edición de "Incubadora de Proyectos", celebrada en Barcelona, se inició el encuentro de los grupos con los posibles inversores. "Yo sabía que alguno se iba a acercar a interesarse", subraya Alba Moreno. Y así fue, pues dos empresarios aseguraron que estarían dispuestos a invertir su dinero en este proyecto que lucha contra el "bullying".

Además, la experiencia de tres días en Barcelona, donde han asistido a clases personalizadas sobre marketing, identidad corporativa, diseño o finanzas ha sido muy positiva. "Al principio resultó un poco duro, ya que estábamos en plena Semana Santa y las jornadas eran intensivas, pero nos ha gustado y hemos aprendido sobre cómo poner en marcha nuestro propio proyecto", asegura Alba Moreno.