Fernando Martínez-Maíllo fue uno de los primeros en felicitar a Alfonso Fernández Mañueco por la victoria obtenida en el proceso de primarias del Partido Popular de Castilla y León. Un triunfo que, para el coordinador general del partido a nivel nacional y presidente de los populares zamoranos, se basa en la "cercanía, saber hacer y templanza" del alcalde de Salamanca. Maíllo cree firmemente que la labor de Mañueco al frente de los populares de la comunidad autónoma servirá para que "todo el PP" se sienta identificado con su Comité Ejecutivo. Algo que conseguirá, según el expresidente de la Diputación Provincial, a través de su perfil "integrador".

El presidente de los populares de Zamora ha incidido en el "magnífico resultado" obtenido en las urnas por Alfonso Fernández Mañueco que le ha servido para convertirse en candidato único a la presidencia del Partido Popular de Castilla y León. "Han hablado las urnas y ha hablado un sistema de doble vuelta que está resultando muy exitoso", explica el coordinador general del PP. No obstante, a Maíllo no se le escapan los problemas derivados del censo que han causado controversia en provincias como León. "Esas dificultades tendrán que irse solventando con el tiempo. Se tendrá que engrasar el modelo de doble vuelta, pero está claro que ha llegado para quedarse", analiza.

Martínez-Maíllo ha tenido también palabras para el perdedor en las urnas, Antonio Silván. "Hay que destacar el paso que dio para dirigir el PP de Castilla y León, pero al fin y al cabo esto es democracia y nadie puede reprocharlo. La confrontación de ideas es aconsejable y remarcable, pero al final son los afiliados quienes deciden. La democracia siempre vence y, en este caso, de manera bastante contundente", apunta el presidente del PP de Zamora.

Por último, el dirigente popular ha respondido a aquellos que se han quejado sobre el escaso número de votantes inscritos en comparación con los afiliados. "Algunas críticas que ha habido del sistema tendrían que haberse formulado cuando se aprobó. Son condiciones de igualdad para todos", explica. "Será bueno que en el futuro pueda haber más participación, pero eso no invalida en absoluto el claro resultado porque quienes han participado son quienes han querido participar y así lo han hecho", concluye Martínez-Maíllo.