El juez decretó ayer el ingreso en prisión provisional y sin fianza para los cuatro jóvenes detenidos el pasado martes por perpetrar, al menos, tres robos en Zamora capital con violencia, con el uso de una navaja, y por lesiones a dos de las víctimas, que sufrieron heridas leves, según la información recabada por este diario de fuentes de la investigación. Los cuatro arrestados, para cuya localización fueron fundamentales las descripciones ofrecidas por una de las víctimas, fueron trasladados a la macroprisión de Topas por la tarde.

Los cuatro investigados abandonaban el Juzgado de Guardia hacia las 15.00 horas, después de ser interrogados durante unos 15 minutos cada uno de ellos sobre los dos asaltos a mujeres a punta de navaja: uno de ellos perpetrado en el exterior de un supermercado situado en la carretera de Villalpando; y otro en la calle de la Salud de San José Obrero. Las dos mujeres sufrieron cortes en la cara y en las muñecas, respectivamente, y tuvieron que ser atendidas de las lesiones en urgencias.

La Policía Nacional les imputa otro atraco más sobre el que también les interrogó el magistrado del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1, por separado y en presencia de una fiscal y su abogada de oficio. Se les imputa un tercer robo, sin que en esta ocasión la mujer sufriera ningún daño físico, según ha podido saber La Opinión de Zamora.

Los cuatro arrestados, de nacionalidad portuguesa, se desplazaron desde el país vecino en un turismo que les permitía huir de las zonas en las que delinquían, según las diligencias, lo que no impidió, no obstante, que la Policía Nacional pudiera localizarles y arrestarles el mismo día en el que recibió las denuncias de las mujeres a las que robaron.

Una de las víctimas reconoció a una de las jóvenes que la abordaron, navaja en mano, para exigirle el dinero que llevaban encima. Una de las dos mujeres era la encargada de apuntar con la navaja en el cuello a las personas que abordaron para robarles.

Al parecer, los hombres esperaban en el coche para salir del lugar en el que actuaban con la mayor rapidez posible, una vez que las dos mujeres habían cometido el asalto.

Una de las zamoranas, a la que arrebataron el bolso, terminó sufriendo cortes en las muñecas, al parecer por la resistencia que opuso para tratar de impedir el robo. La gravedad de los hechos ha llevado al magistrado a decretar el ingreso en prisión de los cuatro, dos de ellos pareja, sin posibilidad de que se les permita salir por el momento de Topas, donde ingresaron ayer, al fijar el juez prisión provisional sin posibilidad de eludirla con el pago de una fianza.