La templada tarde hizo que cientos y cientos de zamoranos invadieran ayer las calles para no perderse ni un detalle del primer desfile del Carnaval que llenó de colorido, alegría y música las calles de Zamora gracias a un millar de personas, pertenecientes a 25 grupos y ocho carrozas, que se inspiraron en la naturaleza, en personajes históricos, de cómic, de películas o incluso en humoristas para protagonizan sus propuestas carnavaleras.
El amplio cortejo, que recorrió desde Príncipe de Asturias hasta la Plaza Mayor, lo abría un grupo de alumnos de una escuela de danza moderna que avanzaba haciendo coreografías, seguida de la primera carroza ambientada en el mar con una gran medusa mientras que a pie iban caballitos de mar, estrellas, pequeñas medusas y un banco de peces muy coloristas. Tras ellos un ajedrez con todas la piezas y una gran reina o "Galletobolas" con hasta Triki, el popular monstruo de las galletas de Barrio Sésamo.
La Amazonia llegó a Zamora de la mano de un conjunto con numerosos animales, entre los que llamaba la atención unos vistosos pavos reales con sus coloristas colas desplegadas, iguanas y hasta cocodrilos.
Astérix, Obélix y demás personajes de la aldea gala, creada por Goscinny, sin olvidar los romanos y hasta el propio César como auriga enlazaron con un grupo de piruletas con forma de corazón. Entre sus integrantes un joven obsequiaba a los niños con el mismo caramelo que protagonizan los disfraces del AMPA Divina Providencia.
El colorido de un grupo de globos aerostáticos y una fantasía de estrellas dieron paso a un cuidada recreación del universo de Bob Esponja. En la carroza estaban su casa acompañada por Patricio, mientras que Bob bailaba acompañado de Calamardo y otros personajes de la televisiva serie de dibujos animados.
Los Colados, con la Seña Bermeja a la cabeza, hicieron su particular homenaje a Omaíta de los populares hermanos Cadaval, Los Morancos. Entre los integrantes de este conjunto los había que hasta besaban recortes de prensa del corazón en el que aparecían populares cantantes para risa de muchos de los presentes en las aceras.
"Potatilandia" es la denominación que desde la Escuela de Educación Infantil de La Aldehuela han otorgado a su apuesta por personajes del universo del muñeco Mr. Potato.
A un grupo de cíngaras le siguió "El saloon", un salón del oeste con todo tipo de detalles y su grupo de cabareteras.
Un conjunto de fuentes con distintos detalles, entre los que llamó la atención una con un pez con todas sus escamas, captó la atención de muchos presentes.
Carritos para hacer palomitas de maíz así como envases con estos aperitivos y los leones de los Menudos Melenudos precedieron a los Menesianos, con su peculiar manera "boom" inmobiliario ya que desde la carroza un hombre arengaba al público a que comprara un piso.
