"Aquí no molesta a nadie y está más cerca para poder venir dando un paseo"

"Lo han dejado fatal, no se puede aparcar y paralizan el tráfico por todo el barrio"

En el conflicto que durante las últimas semanas ha golpeado al mercadillo faltaba una pata. Habían hablado los vecinos afectados, el equipo de Gobierno, los grupos de la oposición y los vendedores ambulantes. Pero, ¿y los clientes? Ayer hablaron, durante la primera jornada de la cita de los martes en su nueva ubicación del Alto de los Curas. Y el sentir general es claro: "el nuevo entorno es mejor porque queda más a mano". Con timidez, desde primera hora de la mañana, los zamoranos se fueron acercando a la calle Burgos y el camino de Las Llamas para escrutar la novedad. Al mediodía, la afluencia ya era la de una jornada normal y las ventas fueron ganando la partida a las palabras. Ahora solo resta esperar para que sea el tiempo quien dé o quite razones.

"Nosotros solo queremos trabajar y molestar lo menos posible". Los vendedores ambulantes de Zamora querían quitar hierro a la polémica suscitada en torno al mercadillo durante la primera jornada en el Alto de los Curas. Por eso, sus palabras eran de conciliación con los vecinos, aunque también quisieron dar un toque de atención al concejal de Barrios, presente a lo largo de la mañana entre los stands. "Estos puestos que nos has dejado son muy pequeños", escuchaba prácticamente a cada paso Christoph Strieder.

El edil de Comercio acudió al Alto de los Curas para comprobar que todo estuviera en su sitio y también con el objetivo de escuchar propuestas, quejas o peticiones. No solo de los ambulantes, sino también de los afectados. Más de un vecino se le acercó para recriminarle que Vista Alegre no era el mejor lugar para celebrar un mercadillo. Fue el caso de José Luis del Campo, cuya vivienda se encuentra del otro lado de la vía. "Esto está fatal. Nos han cortado toda la calle y ahora tenemos que ir a dar la vuelta a tomar por culo. No digo que no haya mercadillo, pero sí que lo pongan unas calles más abajo y que dejen esto transitable para los vehículos", denunciaba este afectado.

La clientela, por su parte, se mostraba más benévola con la nueva ubicación. Una ciudadana que realizaba sus compras, Carmen Hernández, aseguraba estar contenta con el nuevo destino del mercado ambulante por encontrarse "mucho más cerca para poder llegar dando un paseo". Sobre la posibilidad de molestar a los vecinos, esta clienta creía que la problemática no era "tan grande", aunque reconocía que "habría que estar en el pellejo para conocerlo". Pilar Moralejo se expresaba en términos parecidos. "Pienso que aquí no vive tanta gente como para generar muchas molestias. A nosotras, desde luego, nos queda más cerca que Ifeza", indicaba.

Un día después de la celebración del mercadillo, lo cierto es que la división de opiniones es latente. Por eso, el tiempo tendrá que emitir su veredicto.

"Aquí no vive tanta gente como para que esto pueda ser un problema serio"

"La gente que viene al Clínico tiene muchos más sitios para dejar el coche por la zona"