Lo había anticipado en la presentación del pasado jueves: la continuidad del "Morentismo" a través de sus vástagos y el flamenco desde y un envoltorio dulcificado. También comenté la juventud de los artistas, y efectivamente, le falta todavía mucha práctica y camino que recorrer hasta definir sus propias señas de identidad musical. Pero están en ello, no sólo apuntan maneras, también muestran inteligencia, igual que lo hiciera su padre, al partir de unas facultades vocales muy limitadas,exprimirlas al máximo ydistorsionar las formas jondas hasta el extremo de "reinventar su flamenco". Y esto no deja de ser un importante plus. Como en cualquier faceta de la vida, echar mano del ingenio, además de constituir un importante añadido, puede marcar la línea divisoria entre el éxito y el fracaso.
Abren la noche, José Enrique Morente al cante, David Carmona al toque y la percusión de Pedro Garrabe, para interpretar canción cerrada con fandango de Frasquito Yerbagüena. Quedan cantaor y guitarrista para hacer soleares, las cuatro de Cádiz: dos de Enrique El Mellizo y dos de Paquirri El Guanté. Por Levante, taranta y cartagenera. Se añade la percusión para iniciar tientos recordando al gaditano Manolo Vargas, seguir con tangos personales de su padre y tangos extremeños. Para terminar esta primera parte desgranan diversas letras de canciones -incluyendo El emigrante del gran Juanito Valdegrama- todo a ello en ritmo de bulerías.
Solo de guitarra a cargo de David Carmona para dar paso a Soleá Morente, acompañada únicamente de la percusión y de los teclados de JJ Machuca. Media granaina terminada por canción. Siguen con sevillanas. De nuevo canción. Otra canción con intercalado de seguiriya de Francisco La Perla. Dos canciones más para reclama la presencia del tocaor David Carmona y de su hermano. Hacen tangos y terminan su presencia en Zamora con dos canciones -una cada hermano- siendo despedidos con prolongada ovación por un público, que rozando el lleno, quedó agradecido y satisfecho. Próxima cita, jueves 16 con Lole Montoya en "Lole canta a Manuel".
