La Junta de Castilla y León va a "flexibilizar" el mapa de ordenación del territorio con el fin de que "todo el mundo se sienta cómodo", lo que afectará a casos como el de las localidades de Cañizal, Olmo y Vallesa de la Guareña, con médico en Salamanca e instituto en Fuentesaúco o las mancomunidades actuales, que, si funcionan realmente, tendrán el mismo tratamiento que las nuevas de interés general. Es el mensaje que transmitió ayer en Zamora el consejero de Presidencia y vicepresidente de la Junta, José Antonio de Santiago Juárez, que presidió la reunión de la Comisión de Ordenación Territorial en la Delegación de la Junta y posteriormente realizó una visita institucional al Consejo Consultivo, que preside "mi buen amigo" Mario Amilivia.

La idea es que en la segunda quincena del próximo mes de enero entre en las Cortes el último de los proyectos de ley, el que culmina la ordenación territorial, con dos objetivos. Uno, "garantizar los servicios públicos competencia de la Junta" dándoles rango de ley, ya que "ahora no están garantizados, porque sólo hay una orden que los regula, que se podría cambiar en cualquier momento". Se trata, ejemplificó, de mantener una escuela abierta con cuatro niños, una media de 15 consultorios por centro de salud, los servicios sociales o la dependencia. Eso, dijo, es lo importante, más que el mapa: "Había ciertas quejas por la existencia de ciertas rigideces en el modelo puro y duro y este proyecto lo flexibiliza. Porque lo importante son los derechos, no los mapas. Lo importante es la luna, no el dedo que la señala. El objetivo es que todo el mundo se sienta cómodo y prestar los servicios que se recogen por ley".

Otro de los pilares es "facilitar una nueva herramienta para que los municipios, si quieren de forma voluntaria, se agrupen para prestar los servicios de su competencia de forma más eficiente". Es decir, precisó que las mancomunidades de interés general serán no sólo voluntarias, sino compatibles con las actuales mancomunidades que realmente funcionen, es decir, excluyendo a las que solo figuran sobre el papel. "Había una leyenda urbana que decía que se iba a primar a las mancomunidades de interés general, y que incluso las clásicas iban a desaparecer. Nunca he hablado de eso, van a tener el mismo tratamiento".

La Comisión trató también otros asuntos, como la reforma de la función pública de Castilla y León, que modernizará la gestión y homogeneizará los puestos de trabajo y el proyecto para incrementar la participación de la sociedad civil en las iniciativas que lleve a cabo el Gobierno autonómico desde su inicio.