La Casa de Zamora en Valladolid volvió a salir a las calles de la capital pucelana para procesionar con la patrona de los zamoranos, la Virgen de la Concha, a laque rindieron homenaje con una eucaristía en la iglesia de San Miguel y San Julián.

Fueron muchos los socios que se unieron tanto al desfile procesional como a la misa, que estuvo oficiada por el sacerdote zamorano Eugenio Oterino Blanco y cantado por el grupo Aires Zamoranos, que pertenece a esta asociación cultural.

Tras la misa llegó el turno de la ofrenda floral, que estuvo al cargo de las casas regionales y provinciales que se asientan en Valladolid. Sus representantes acudieron ataviados con los trajes regionales. También estuvieron presentes miembros del propio Ayuntamiento de Valladolid, de la Federación de Casas Regionales y Provinciales en Castilla y León y de la Cofradía de la Virgen de la Concha, además de socios de la casa encargada de estos actos y múltiples simpatizantes. Todos ellos pudieron disfrutar después de un vino zamorano en la sede de la agrupación.

Este fue el acto central de la Semana Cultural en honor a la Virgen de la Concha, que este año ha alcanzado su XXIV edición. Como en años anteriores, un ilustre zamorano fue el encargado de dar el pistoletazo de salida a estas fiestas. En esta ocasión le tocó el turno al periodista Agustín Remesal Pérez, de sobra conocido por ser corresponsal de Televisión Española en Roma, París, Nueva York, Londres, Lisboa o Jerusalén.

Los miembros del grupo de teatro Puente Colgante hicieron reír al público con la obra "Anacleto se divorcia", de Pedro Muñoz Seca, mientras que Nicanor Borrego García impartió una conferencia sobre "Optimismo y vida activa". No fue la única charla del programa cultural, puesto que el zamorano Plácido Pedrero Morillo disertó sobre "Del Cerco de Zamora, poemas y romancero".

El presidente de la Casa de Zamora en Valladolid, Amadeo Blanco Madrid, de Manganeses de la Lampreana, aseguró que esta semana sirve para "abrir las puertas de la asociación y dar a conocer a todas las personas que deseen acompañarnos en los actos, las raíces, las costumbres, el folclore, la gastronomía y la cultura de Zamora y su provincia". Un deseo por el que trabajan todos los días del año.