Hasta 56 de los 101 ayuntamientos que este año se han acogido a los planes municipales de obras ya han justificado las actuaciones ejecutadas en su municipio. Por el contrario, casi la mitad de ellos todavía no ha presentado toda la documentación, pero tendrán que hacerlo antes de que acabe el mes, según los cálculos del diputado de Obras, Juan Dúo.

En cualquier caso, todas las actuaciones en los municipios están ya finalizadas, a falta de presentar la correspondiente justificación a la Diputación dentro de un plazo que concluye el 30 de noviembre, tras la concesión de quince días de plazo. En el caso de no hacerlo, los ayuntamientos perderían la parte proporcional a la que se haya dejado de justificar en el momento del cumplimiento de los plazos estipulados.

Casi el 90% de la financiación que la Diputación Provincial ha consignado para el plan municipal de obras -antiguos planes provinciales- ha ido destinado a obra básica. Es decir, de los 9,2 millones de euros plasmados para los dos próximos ejercicios -4,2 para este año y 5 millones para el que viene-, 8,2 servirán para cubrir actuaciones imprescindibles de abastecimiento de agua potable, alcantarillado, pavimentación de vías públicas, alumbrado y cementerio. Estas obras han sido financiadas en su totalidad por la institución provincial, que por primera vez costeaba de forma íntegra todas aquellas actuaciones relacionadas con obra básica.

El criterio de la Diputación Provincial a la hora de conceder el reparto de subvenciones ha sido de 18.000 euros a cada ayuntamiento que solicitó la ayuda con cargo al plan municipal de obras y 4.500 por cada anejo del Ayuntamiento en cuestión. A mayores, por cada habitante, alrededor de 40 euros por vecino. En el caso de que el solicitante fuera una entidad local menor con competencias para ejecutar obras, la cuantía ha sido también de 4.500 euros más los 40 por residente. El mismo criterio de reparto será el que seguirá la Diputación el próximo año de cara a los próximos planes municipales de obra, con carácter bianual, y que reserva para el próximo ejercicio 5 millones de euros. En la próxima convocatoria entrarán los municipios de menor población con el objetivo de atender primero a los municipios con mayor número de vecinos.

Las obras subvencionables serán de nuevo todas aquellas que afecten a servicios públicos prestados por las entidades locales cuya necesidad sea justificada. También los gastos de redacción de proyecto, dirección de obra, control de seguridad y salud, y control de calidad. Debido a las trabas a la hora de la tramitación inicial, la Diputación concedió una prórroga para flexibilizar la situación a los municipios.