La propietaria del inmueble de Guarrate asaltado por dos de los imputados en un delito de robo con violencia o intimidación, Benita Pérez Pascual, llegó a su casa de realizar unas compras, al entrar escuchó ruidos y se topó con uno de los delincuentes, de iniciales J.A.P.P., que portaba el arma de fogueo "de apariencia normal y en perfecto estado de uso", según el auto del procedimiento abreviado abierto por la juez de Toro. Fue con ese mismo arma con el que intimidó a la víctima, incluso la llegó a golpear con la culata en la cara, tras impedirle abandonar la casa y huir. El acusado le propinó varios puñetazos antes de tirarle al suelo, al tiempo que formulaba la misma pregunta: ¿dónde está la caja fuerte?. De ella les había hablado su exsocio y expresidente de Pevafersa, Vicente Fernández Manso, de acuerdo con lo reflejado en el auto judicial. El imputado no dudó en atemorizar a Benita Pérez, posiblemente para impedir que se moviera una vez que él y su compañero de fechorías estuvieran fuera de la vivienda, al exigirle que permaneciera en el suelo porque quien le acompañaba tenía una pistola recortada y se encontraba también en la casa. La instó a que esperase varios minutos tras su marcha y la arrebató el teléfono móvil antes de abandonar el domicilio. La Guardia Civil halló en las inmediaciones del lugar donde tuvieron lugar los hechos las prendas de vestir que J.A.P.P. llevaba puestas el día del suceso, las que había descrito la víctima.