La campaña de vacunación frente a la gripe se extenderá durante siete semanas, desde el próximo lunes, 7 de noviembre, hasta el 23 de diciembre para los zamoranos pertenecientes a los grupos de riesgo sanitario y social, señalaron ayer en la presentación, en Valladolid el consejero de Sanidad, Antonio Sáez, el gerente de Sacyl, Rafael López y el director general de Salud Pública, Agustín Álvarez Nogal.

Los colectivos de riesgo los forman los enfermos crónicos (pulmonares, cardíacos, diabéticos o inmunodeprimidos, entre otros); personas con discapacidad o déficit cognitivo (Síndrome de Down o demencias); niños y adolescentes de entre 6 y 18 años que reciban tratamientos prolongados con ácido acetilsalicílico, por la posibilidad de desarrollar el síndrome de Reye tras la gripe; personas con obesidad mórbida (índice de masa corporal superior a 40); y mujeres embarazadas, en cualquier momento del embarazo. También se recomienda la vacunación a personas ingresadas en instituciones cerradas, como residencias, o trabajadores que pueden transmitir la enfermedad a grupos de riesgo, como sanitarios o empleados de geriátricos. Además están incluidos los que trabajen en servicios esenciales para la Comunidad: bomberos, cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, Protección Civil, entre otros y los trabajadores de granjas y mataderos de aves y otros relacionados con el medio ambiente; y personal de educación, especialmente de guarderías y de centros de Educación Infantil.

La Junta ha gastado 2,8 millones en las 672.000 dosis para hacer frente a la campaña de vacunación, de las cuales 462.000 son unidades vacunales con adyuvante y otras 210.000 vacunas trivalentes inactivadas. En Zamora son 53.980 dosis: 38.560 con adyuvante y 15.420 trivalentes.