Desde desarrollar un cuento con la libertad como protagonista hasta hacer una parodia de uno mismo o salir a escena para enseñar a los compañeros sus habilidades. La veintena de niños -con edades comprendidas entre los 8 y los 12 años- que comenzó ayer el taller "En tus zapatos", dirigido por Eléonore Bisson, de Cándido Producciones, dejó atrás su miedo escénico y su vergüenza para lanzarse a participar en este laboratorio teatral de valores donde el objetivo es "explorar algunos valores esenciales de la vida. Valores que sustentan la vivencia cotidiana y la hacen tan bella y tan difícil", argumentaba su coordinadora.

El Centro de Interpretación de las Ciudades Medievales sirvió de escenario durante toda la mañana para que los niños, descalzos y sentados en el suelo, aplaudieran las imitaciones, acrobacias y sentido del humor o dotes musicales de los participantes.

En el arranque de este taller habían estado también los padres de los alumnos y contó con la presencia de la psicóloga Mar Gallego, especializada en educación emocional de niños y jóvenes. "Queremos que los mayores también se impliquen en esta actividad que tiene a los valores como protagonistas", indicó Bisson.

Poco después los niños se quedaban solos con ella y su compañero Cándido de Castro. Juntos guiaron a los niños en los primeros pasos de este taller, que comenzó con un "calentamiento" para disipar nervios y vergüenzas ante el público. Así, rompieron la timidez poniendo en el escenario su personalidad, para caricaturizarla después. "Es una forma de trabajo de clown, que parte de lo que te ruboriza para aprender a reírse de uno mismo y aceptarse, porque el humor es una herramienta para la vida, es lo que nos salva al final", argumentó.

El curso continuó con la presentación de las habilidades de cada uno. Los niños presentaron desde su capacidad para cantar o contar chistes hasta la flexibilidad de sus cuerpos o la facilidad para el baile.

Por último, todos ellos recogieron un papel de un pequeño saco para inventar una historia con el arranque de la palabra escogida, que en todos los casos era "libertad", para aprender así qué significa para cada uno y reflejarlo en su cuaderno, que se convertirá en un cuaderno de viaje. Con todo este bagaje, el primer día de curso finalizó con la construcción de un personaje, basado en sus experiencias del día y adornado con diferente vestuario.

Este original taller pretende ser un momento para sentir, explorar, crear, improvisar y también debatir. "Entre juegos, lecturas y tertulias podrán explorar la comunicación, la escucha o la resolución de conflictos, pero también su relación personal a temas como la importancia de quererse, la libertad, las diferencias culturales, la igualdad de género o la amistad", enumera Bisson.

Al encuentro de ayer le seguirán los talleres de "Zapatos de colores" y "Caminemos juntos", para finalizar con un encuentro que unirá a padres e hijos para abrir juntos su particular cuaderno de viaje y participar en la charla que impartirá la psicóloga Mar Gallego como final del camino... o principio de uno nuevo.