El 67% de los alumnos de Bachillerato de la provincia de Zamora decidió no asistir ayer a clase en apoyo a la huelga convocada a nivel nacional contra las reválidas y la Lomce. Un porcentaje que se mantuvo también entre los estudiantes de 3º y 4º de la ESO -con un 67,8% de no asistencia, según los datos de la Consejería de Educación- y que también fue alto en los ciclos formativos, con un 52,4% de ausencia en las aulas.

Desde la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (FAPA) su presidente provincial, José Antonio Felipe, destacó "muy positivamente" tanto los datos de seguimiento de la huelga en los centros educativos como el apoyo por parte de las familias y el resto de entidades que conforma la Plataforma en Defensa de la Escuela Pública. Por ello, subrayó que es el momento "de que los políticos tomen nota" de estas movilizaciones sociales convocadas en esta ocasión por las familias "y más teniendo en cuenta los datos tan positivos en Castilla y León, una comunidad en la que nos cuesta mucho salir a la calle para reivindicar", reconoció.

También en la provincia "se han visto sobrepasadas las expectativas", apuntó Felipe, puesto que fueron muchos los centros de diferentes localidades los que se unieron a esta protesta delante de sus ayuntamientos, mucho de ellos con prendas verdes, color que caracteriza el movimiento a favor de la escuela pública desde el inicio de las movilizaciones.

Desde la delegación zamorana del Sindicato de Estudiantes, su portavoz Jorge Ferrón aseguró sentirse "muy satisfecho" de los datos de seguimiento de la huelga y más todavía del apoyo a la manifestación convocada por este colectivo, que aglutinó en La Marina a cerca de 500 alumnos, apoyados también por la FAPA, que cerraba la marcha. "Nos quieren vender que la reválida de 4º de la ESO no tiene validez, pero no nos podemos fiar de un gobierno como este, así que hasta que esta ley no esté derogada en el Boletín Oficial del Estado, no estaremos satisfechos, así que seguiremos con las movilizaciones".

Al grito de "No nos mires, únete", "Que no queremos pagar tus deudas en sanidad y educación", "El hijo del obrero a la universidad", "Tú qué estás mirando, también te están robando" o "Somos estudiantes, no maleantes", de los manifestantes, la marcha contra la nueva ley de educación recorrió toda la calle Santa Clara hasta llegar a la plaza de la Constitución, donde el portavoz de los estudiantes leyó el comunicado de la jornada frente a la pancarta "Frente a los recortes y la Lomce, defiende la escuela pública", que había abierto la marcha.

Por la tarde fue el turno de la concentración, también frente a la Subdelegación del Gobierno, a la que estaban llamadas las familias y que quisieron apoyar el resto de las organizaciones de la Plataforma en Defensa de la Escuela Pública. Más de 150 personas se acercaron hasta la plaza de la Constitución para escuchar el manifiesto de la huelga y solicitar un pacto educativo consensuado y que tenga representación de todos los actores, para que la educación "deje de utilizarse como un arma política".