La Fundación Villalar generará grupos de trabajo con profesionales de sectores socioculturales de la provincia y agentes locales zamoranos para impulsar un plan estratégico que remitirán a las instituciones para su materialización a través de fondos públicos. El arquitecto zamorano Francisco Somoza fue el elegido por la Fundación Villalar para asistir el pasado mes de abril en las Cortes de Castilla y León a las jornadas "Quiénes somos", en las que nueve ponentes, uno por provincia, analizaron la realidad social y la identidad histórica y cultural de cada territorio. El resultado de ese análisis y sus propuestas servirán para elaborar el próximo año un plan estratégico con la promoción de actuaciones en las nueve provincias, incluida Zamora.

La cultura y el patrimonio son los principales sectores que aborda la aportación zamorana, incluido el movimiento cultural alternativo o de vanguardia generado en la ciudad en los últimos años. No obstante, Somoza entiende la cultura "como locomotora de la dinamización de sectores, incluido el económico, porque cuando no genera actividad o movimiento y no es rentable en términos sociales está comprobado que la cultura no tiene éxito", sopesa. No obstante, su preocupación es "dar voz a todos aquellos que están luchando de verdad por ello y que cada día trabajan por hacer cosas", de ahí la idoneidad de la creación de grupos de trabajo con los sectores involucrados para dar forma al documento. Esta profundización permitirá "ir más allá del análisis general que nosotros presentamos, porque cualquier generalidad tiene deficiencias y hay que introducirse en cada ámbito para ahondar", plantea Somoza, quien tilda el trabajo conjunto de la Fundación como "muy disciplinado".

Uno de los objetivos de Somoza con la radiografía que realizó de Zamora fue romper el círculo vicioso que lleva a la gente a "irse porque no hay actividad mientras que no hay actividad porque la gente se va", sopesa, tras generar un trabajo específico para la Fundación Villalar fruto de sus años de trayectoria profesional en la provincia. Además, apuesta por una racionalización de las inversiones que se ajusten a las necesidades de la población y por "agudizar la imaginación en tiempos de crisis", en la línea de recuperar los espacios arquitectónicos para la cultura. Las propuestas irán dirigidas tanto a la Junta de Castilla y León como a los ayuntamientos y diputaciones de las respectivas provincias para materializar las iniciativas. "Muchas veces yo creo que las instituciones no disponen porque previamente no cuentan con propuestas que les indiquen los caminos y están volcados en otras ocupaciones diarias que no les permiten la pausa necesaria para pensar qué se debe hacer por esa propia vorágine de tener que hacerlo".

En su intervención, Somoza habló de sus paisanos, los zamoranos, como ciudadanos "bastante interesados en la cultura y preocupados por su ciudad y patrimonio". En cualquier caso, alabó a "agentes culturales de primerísimo orden" de la tierra, desde Claudio Rodríguez, Hilario Tundidor, Ángel Fernández Benéitez o José María Mezquita hasta Antonio Pedrero, Tomás Crespo, Javier Carpintero, pero tampoco se olvido de nuevas generaciones creativas que han germinado movimientos culturales, salas de exposiciones y conciertos contemporáneos.

La Fundación Villalar, volcada ahora con la concesión de becas a un artista contemporáneo de la provincia-ya han recibido varias propuestas y solicitudes- pretende también con esta iniciativa favorecer la creación de sinergias entre las diferentes provincias y actuar como catalizador de colaboraciones entre los diferentes agentes culturales.