La localidad malagueña de Casabermeja luce un monumento que homenajea a la Cabra Malagueña y a su fiesta hecho por el escultor zamorano Pedro Fernández Roales.

La pieza de bronce la integran una cabra y su chivo y está situada en la rotonda de acceso al municipio. Antes de la ejecución en metal el artista efectúo varios bocetos de los animales con el asesoramiento de representantes de la Asociación de Criadores de Cabra Malagueña, Cabrama. "Me han facilitado documentación para que la fueran unos ejemplares de pura raza malagueña", certifica el autor.

La mayor dificultad de la pieza ha residido en "lograr el movimiento del mayor animal porque se queda parado entre dos piedras de caliza de la zona, que también he preparado", concreta el escultor que menciona también "la diferencia de alturas" existente entre la cabra y su cría.

El artista tiene una estrecha relación con el municipio de Casabermeja, dado que es profesor en el Museo-Taller de Cerámica de la población y sus alumnos habían hecho hace varios años el monumento a la Cabra Malagueña, compuesto por siete esculturas de cabras, chivas y machos cabríos, una obra destruida recientemente en un acto vandálico.

El encargo del Ayuntamiento ha sido dado a conocer dentro de las celebraciones de octava fiesta de la Cabra Malagueña de Casabermeja, "población donde existe una gran tradición ganadera", ratifica el creador que ha sido uno de los artistas presentes en la muestra Arte Palacio que ha albergado el Antiguo Palacio de la Diputación todo el verano.

Fernández Roales afronta ahora la ejecución de otras cabras en resina de poliéster, en concreto tres cabras, tres chivos y un macho para el centro de interpretación de la Cabra Malagueña.

El escultor, que reside en la provincia de Málaga desde hace varios años, ya cuenta con varios monumentos en la provincia andaluza, entre ellos la escultura a los Verdiales, en Villanueva de la Concepción, o bien otra pieza que homenajea a la Semana Santa de Antequera, donde aparece un cofrade con un niño de la mano.