Una mujer de 41 años resultó herida como consecuencia de un atropello ocurrido en un paso de cebra de las Tres Cruces, a la altura del cruce con la calle Ciudad de Braganza, justo donde se encuentra la sucursal del Banco de Santander. El suceso se produjo hacia las once de la mañana cuando, según indicaron los testigos presenciales, la mujer se disponía a atravesar la calle por el paso de cebra cuando en ese momento apareció el vehículo, que no se percató de su presencia y la atropelló. El golpe, siempre según las declaraciones de los testigos, lanzó a la mujer varios metros.

Los viandantes que estaban en el lugar llamaron inmediatamente a los servicios de emergencias, y fue la Policía Municipal la primera en llegar al lugar de accidente, mientras que la ambulancia del 112 tardaba aún algunos minutos más. Los facultativos recogieron a la víctima del atropello y la atendieron en la ambulancia, antes de trasladarla al hospital.

El suceso produjo una gran curiosidad entre las numerosas personas que se encontraban en la céntrica avenida a esas horas. La Policía Municipal, además de tomar los datos del accidente y la declaración del conductor, que viajaba acompañado por otra persona, se encargó de regular el tráfico, con el fin de dar fluidez a la circulación ya que uno de los carriles estuvo cortado durante las tareas de atención a la persona que sufrió el atropello y su posterior traslado.

Por otra parte, durante la mañana de ayer los semáforos que regulan el tráfico en la plaza de Alemania y la entrada de la avenida Víctor Gallego permanecieron apagados durante un par de horas debido a "una avería" en los dispositivos técnicos, tal y como detalló Antidio Fagúndez, teniente alcalde de Seguridad Ciudadana. Pasado el mediodía, los operarios de la empresa encargada de su mantenimiento se desplazaron al lugar de los hechos, donde llevaron a cabo las tareas de reparación que se tradujeron en la puesta en marcha de los elementos de circulación. Hasta que se reinstauró la normalidad los agentes municipales fueron los encargados de organizar la circulación.

En la Plaza de Alemania confluyen tanto una alta intensidad de tráfico, como la gran cantidad de pasos de cebra que hay en este entorno, muy concurrido de coches y peatones.