"Menos es más". Atraído por la filosofía y la arquitectura singular de Alberto Campo Baeza, un grupo integrado por 24 taiwaneses vino expresamente ayer a Zamora para conocer in situ la sede del Consejo Consultivo de Castilla y León, enclavado a pocos metros de la Catedral.

Procedentes de León, acompañados de la guía oficial de la Junta Camino Vega, los taiwaneses, algunos de ellos arquitectos, se mostraron impresionados por la "armonía" de las líneas del edificio y por sus reflejos y la luz, edificio conocido como "caja de cristal". Camino Vega destacó que "les ha sorprendido fundamentalmente la armonía, la sencillez de sus líneas; y especialmente cómo no se ha visto afectado el entorno histórico-artístico al rodearse el edificio del muro de piedra".

A los turistas les ha llamado la atención desde el exterior del edificio, junto a los restos arqueológicos expuestos, la "filosofía expresada por el cielo y la tierra", un cielo reflejado en los cristales que visten y recubren exteriormente la sede, abierta al público en 2012 y que es sede tanto del Consejo Consultivo como del Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales de Castilla y León. El grupo recaló en la plaza de la Catedral perfectamente documentado sobre la obra y edificios más representativos de Campo Baeza. El portavoz del grupo explicó que conocieron al arquitecto a raíz de una visita a Shangahài. La obra de Alberto Campo Baeza es conocida también en países como Japón, donde estuvo expuesta la maqueta del Consejo Consultivo. El grupo de Taiwán visita desde hace días España y estaba muy interesado en conocer la sede del Consultivo y el nuevo edificio administrativo de la Diputación en la plaza de Viriato. Los ecos de la sede autonómica llegan por lo tanto hasta Oriente. En lo que va de año han visitado el Consultivo grupos de Oporto y Cagliari (Cerdeña, Italia) y del Colegio Leonés.