Las líneas fundamentales del presupuesto de 2017 que la Diputación Provincial llevará mañana a pleno recogen un recorte de las inversiones reales de "5,3 millones de euros" respecto al año en curso". La diputada de Izquierda Unida Laura Rivera pone el acento en esta cifra al entender que "el gasto en inversiones reales es imprescindible para una provincia como Zamora, que aún no tiene garantizadas infraestructuras básicas como el abastecimiento de agua en todos los pueblos o que necesita mejorar carreteras y otras infraestructuras de comunicación", plantea.

A pesar de que el diputado de Economía, Antonio Iglesias, incide en que los datos son "muy provisionales y no es más que un cálculo inicial", el grupo de diputados de IU plantea de nuevo que "tenemos una Diputación rica con remanentes y saneada en una provincia pobre y en desaparición". La reducción "del 70%" de las inversiones prevista para el próximo año es "absolutamente injusto en una provincia que pierde 3.000 habitantes al año, en la que los jóvenes tienen que emigrar y que no tiene cubiertos servicios e infraestructuras básicas".

La situación "es aún más grave si tenemos en cuenta que, según la cuenta general que también se aprueba en pleno, la Diputación tiene un déficit de 3,5 millones por asumir competencias impropias en la prestación de servicios sociales importantes como la residencia de Ancianos de Toro, los centros psiquiátricos, la ayuda a domicilio y la guardería de Benavente, que deberían ser prestados por otras administraciones".

De esta manera, la política económica de la que presume la Diputación supone "detraer del dinero de la Provincia 3,5 millones de competencias impropias y reducir en 5,3 millones las inversiones para el año 2017 para bajar el endeudamiento", concluye Laura Rivera.