El grupo Popular del Ayuntamiento de Zamora, de la mano de su viceportavoz, Víctor López de la Parte, denuncia que el equipo de Gobierno pretende convertir a los empleados de la ORA en delatores de los conductores fuera de las zonas reguladas a través del nuevo contrato que Izquierda Unida y el Partido Socialista esperan aprobar en el pleno del próximo martes.

La nueva ordenanza no requiere la presencia de la Policía Municipal para acompañar a un trabajador de la grúa cuando se retiren los vehículos que estén cometiendo infracciones fuera de la zona azul. Además, incorpora una nueva obligación para los empleados de la ORA: aparte de la vigilancia de los vehículos estacionados dentro de la zona regulada, deberán notificar cualquier vehículo mal aparcado en las inmediaciones de su zona acotada. En el Partido Popular, consideran que la medida tiene un claro afán recaudatorio y que esta última responsabilidad añadida a los trabajadores supondrá un gran negocio ligado a la grúa municipal, "ya que la empresa podría recomendar a sus trabajadores que estuvieran más pendientes de las infracciones que se comentan fuera de las zonas reguladas, ya que, de esta manera, obtendrían una mayor recaudación que atendiendo a las zonas de estacionamiento establecidas".

López de la Parte ha lamentado "que el equipo de Gobierno haya hecho caso omiso a las propuestas planteadas por los trabajadores de la empresa, provocando un notable malestar en la plantilla".