La Dirección General de Tráfico (DGT) señalizará seis tramos de carreteras en la provincia de Zamora (82 en Castilla y León y 300 en España), en los que intensificará el control y vigilancia de la velocidad con medios policiales o automáticos. Los tramos de Intensificación de la Vigilancia de la Velocidad ("Invive"), se reconocerán por una señal colocada debajo de la limitación genérica de velocidad.

Estos tramos, según informó el Ministerio del Interior son lo más peligrosos tanto por los excesos de velocidad detectados, como por la siniestralidad que presentan. Las zonas dentro de las carreteras de competencia de la DGT se identificaron como aquellas donde se midieron mayores efectos combinados de excesos de velocidad, accidentalidad y mortalidad en el quinquenio 2010-2014.

En concreto, el listado incluye seis tramos en la provincia de Zamora, situados en las carreteras nacionales 122, 525, 631, 630 y la CL-612, que suman 285 kilómetros. Seis en Zamora (dos en la N-122, uno en la N-525, uno en la N-631, uno en la CL-612 y otro en la N-630). En concreto, la N-122 incluye prácticamente todo el trazado entre Zamora y Alcañices, donde se siguen registrando accidentes graves. También figura la carretera nacional 525, desde su nacimiento en Benavente hasta aproximadamente la altura de Mombuey, en la Carballeda. La nacional 631 figura como tramo de intensificación de la vigilancia en todo su recorrido, desde Montamarta a Rionegro del Puente, mientras la N-630 tiene 37 kilómetros entre Zamora y Benavente y la CL-612 otros 44 entre Villalpando y la provincia de Valladolid.