Los vecinos del barrio de La Horta denuncian la existencia de roedores en la plaza de Santa Lucia y en las calles de los alrededores. La presencia de estos roedores en la zona ha afectado a la vida diaria de los habitantes durante los últimos meses, quienes sienten "repulsión" ante esta plaga.

La aparición de los nidos de ratas podría venir dada, según señalan los propios vecinos, por la suciedad y el abandono de los solares del lugar. "Son muchos los que tiran sus basuras para el interior de estos terrenos, lo que supone un "festín" para estos animales", denuncian los afectados.

Aunque los animales se podían ver en el lugar con anterioridad de forma esporádica, desde hace unos meses la situación se ha vuelto "insostenible". En busca de comida, entran en los portales y en casas bajas de las cercanías poniendo en peligro la salud de la población. De hecho, las ratas son uno de los mamíferos que más enfermedades puede transmitir al ser humano, ya sea por los parásitos propios como pulgas y piojos, o por un contacto directo mediante una mordedura.

La plaga se une a otra de hormigas que llevan sufriendo los vecinos desde hace meses y que cada vez se hace más incomoda.

El malestar por la presencia de animales indeseados se une al ya existente por otros problemas. El pavimento de las zonas cercanas a la iglesia continúa en una mala situación, con adoquines sueltos que "ponen en peligro" la seguridad de todo aquel que los pise. A pesar de las quejas reiteradas, los vecinos sostienen que el Ayuntamiento no ha puesto remedio por el momento. "Nos mandan de unos responsables a otros, pasándose la pelota, nadie nos soluciona nada", declaran desde la asociación de vecinos del barrio. Además, el abandono de las zonas verdes produce gran inquietud, con árboles enfermos y jardines secos. "Son cosas que pagamos todos y las dejan estropear", comenta una señora del lugar. "La situación actual de la zona solo demuestra la desidia del Ayuntamiento", declara el presidente de la asociación de vecinos, Miguel de la Peña.

El popular barrio es visitado por cientos de turistas a lo largo del año con motivo de museos, hoteles y monumentos. Estos problemas presentan una "mala imagen" de la zona para todos aquellos que vienen de fuera para conocer Zamora.