El Foro por la Memoria de Zamora ha sido el gran impulsor de la iniciativa tomada por el Ayuntamiento de Zamora para el reconocimiento de los trabajadores y concejales municipales depurados de sus cargos en el año 1936. En esta ocasión, el Consistorio ha tramitado la correspondiente petición, pero no ocurrió lo mismo hace una década. En el año 2006, también a instancia del Foro, los grupos de Izquierda Unida en la Diputación de Zamora y en el Ayuntamiento llevaron sendas mociones a los plenos correspondientes para intentar reparar el daño causado a las víctimas de los primeros días de la represión franquista. Lo explica el Foro en la moción enviada al Ayuntamiento. "Hace diez años tuvimos la oportunidad de saldar esta deuda moral, pero la propuesta de Izquierda Unida de condenar la dictadura y declarar el año 2006 como Año de homenaje a las instituciones republicanas y democráticas y expresar reconocimiento a todas las víctimas de la dictadura, especialmente cargos electos y empleados públicos, fue rechazada por el rodillo de la mayoría conservadora, tanto en el Ayuntamiento como en la Diputación, donde la moción no se llegó a votar, gracias a la maniobra de filibusterismo del PP, que impuso la declaración del año de la concordia, celebrando que el espíritu de la Constitución del 78 hubiera permitido pasar página e identificando la reparación moral a las víctimas como voluntad de abrir nuevas heridas", dicta el texto. Nuevamente, lo seguirán intentando.

La decisión de retirar a Carlos Pinilla la calle que lleva su nombre en la capital, así como la distinción de hijo predilecto de Zamora, no ha sentado por igual en función de los colectivos de la capital. Mientras el Foro por la Memoria celebra la iniciativa tomada por el Ayuntamiento, la Semana Santa considera una falta de respeto tratar de esta manera a uno de los grandes mecenas de la Pasión zamorana. El presidente de la Junta pro Semana Santa, Antonio Martín Alén, afirma no estar de acuerdo con la decisión. "La implicación de Carlos Pinilla con la Semana Santa de Zamora ha sido fundamental y por ello no comparto la decisión tomada", indica. "Carlos Pinilla es una persona a la que no se le ha agradecido lo suficiente, no solo en lo referente a la Semana Santa, sino a nivel de toda la provincia", analiza el presidente del órgano de cofradías.

La contribución del político franquista a los desfiles procesionales es de vital importancia para alguna de las cofradías. En el año 1950, la talla de Jesús en su Entrada Triunfal en Jerusalén, la popular Borriquita esculpida por Florentino Trapero, desfiló por primera vez por las calles de Zamora gracias a las 100.000 pesetas que el de Cerecinos del Carrizal donó a la Cofradía. En las mismas fechas, otro donativo de 25.000 pesetas del entonces subsecretario nacional de Trabajo permitió a la Cofradía de Jesús del Vía Crucis adquirir la imagen de la Virgen de la Esperanza, así como sufragar la mesa para procesionar. E igualmente clave fue su contribución económica, junto a la del ministro de Trabajo de Franco entre el 41 y el 57, José Antonio Girón de Velasco, para costear el conjunto de La Despedida de la Cofradía de Jesús en su Tercera Caída.

La dedicación de Carlos Pinilla a la Semana Santa de Zamora le sirvió para actuar como pregonero en el año 1961, mientras que en 1990 recibía el Barandales de Honor, máxima distinción de la Pasión zamorana. La labor de mecenazgo realizada por el de Cerecinos del Carrizal con diferentes cofradías de la capital es, quizá, la razón por la que no ha senado bien en el ámbito de la Semana Santa esta retirada de los honores establecidos.