Los carnavales de Villanueva de Valrojo, el Zangarrón de Montamarta, la Filandorra de Ferreras de Arriba, el Atenazador de San Vicente de la Cabeza, la Danza del Paloteo de Tábara y los Diablos de Sarracín de Aliste han representado el pasado fin de semana en Gijón a las Mascaradas de Zamora. Hasta allí viajaron los antruejos de la provincia para participar por primera vez en el festival Arco Atlántico de Gijón a iniciativa del ayuntamiento de la localidad.

El desfile, pasado por agua, sirvió para que Zamora llevara a la ciudad asturiana su tradición, tal y como había acordado el vicepresidente del Patronato de Turismo de la Diputación Provincial de Zamora, José Luis Prieto Calderón, con los representantes de los grupos de Mascaradas de la provincia.

El festival gijonés reúne en la ciudad lo mejor de la cultura y gastronomía atlántica. Se trata de un escaparate intercultural que reúnen las máximas representaciones de las regiones del Atlántico, con Gijón como punto de encuentro. Música, danza, teatro, exposiciones, literatura, folklore, gastronomía, rutas y excursiones con el bus atlántico, oficios tradicionales o talleres son algunas de las actividades que componen el Festival Arco Atlántico.

La presencia zamorana en Gijón sirvió de antesala para la celebración en septiembre del desfile de la Máscara Ibérica, que acogerá la capital con la participación de más de 400 personas llegadas tanto del España como de Portugal. En este sentido, el Patronato de Turismo y los representantes de las Mascaradas han llegado a un acuerdo para colaborar en la búsqueda de materiales y proveedores para elaborar los trajes y las máscaras ante la dificultad actual para encontrar artesanos que se dediquen a ello.

Las peticiones se centralizan en el propio Patronato de Turismo de la Diputación Provincial con el objetivo de rentabilizar y optimizar los recursos existentes.