El fotógrafo José Antonio Pascual presenta una treintena de imágenes en la sala de exposiciones de la Encarnación. En este trabajo, el más personal que ha realizado en su trayectoria, retrata la trashumancia desde tierras alistanas a Sanabria.

-¿Cómo nació su interés por el mundo de la trashumancia?

-Mi abuelo ha sido pastor y recuerdo, con tres o cuatro años, encontrarme en su casa lo que se llama en Aliste el portalón lleno de ovejas. Me llamaban mucho la atención las cabezas de ganado y los corderos y esos perros enormes que ladraban. A mayores mi padre que ha explicado cómo vivían. Creo que estos antecedentes familiares hicieron que en mí surgiera un interés por conocer más en profundizar el mundo del pastoreo.

-El proyecto que ahora vemos en la Encarnación comenzó...

-Hace unos diez años. Comenzó porque cuando transitaba por una carretera y veía a un pastor, empecé a pararme y estaba un rato con él. Un día un amigo que conoce muy bien la provincia me comentó que todavía quedaban un grupo de pastores que realizaban la trashumancia desde Aliste a Sanabria. Él me consiguió el teléfono del veterinario que lleva la comarca de Aliste, lo llamé y me puso en contacto con uno de esos pastores, con Tomás García Peña. A quien telefoneé para poder pasar unas jornadas con ellos.

-¿Cómo fue ese primer contacto?

-Fuimos mi amigo Marcos Antón y yo con la idea de dormir un día con ellos. Incautos de nosotros llevamos pantalones cortos y una manta para dormir porque nos dijeron que dormían con así y pasamos mucho frío, casi ni dormimos. (Risas). Lo que iba a ser un día y medio se transformó en cuatro y la experiencia de esos días fue brutal. Cuando estás en el valle de Ungilde las horas pesan y se escucha el silencio. Oyes de vez en cuando las ovejas pero no pasa nada. Además son unos hombres muy cercanos y llanos que desde un primero momento nos dieron todo tipo de facilidades porque nos acogieron como si fuéramos uno más e incluso en ocasiones les ayudamos a acarrear el ganado. Posteriormente volvimos en septiembre a Puerto Porto y cuando llegamos eran otros pastores porque se van turnando, hecho que desconocíamos, pero nos trataron magníficamente durante los cuatro días que volvimos a estar con ellos. Nos han tratado como si fuéramos familia y ellos han sido los primeros en conocer mi trabajo.

-¿Las imágenes que se muestran en la exposición son de aquellas dos ocasiones?

-Sí, pero he seguido haciendo más hasta contar con más de 6.000 imágenes de la trashumancia. De hecho en la muestra hay una imagen tomada hace dos meses, la de la esquila, en mi pueblo, Puercas con la que quiero tributar un homenaje a mi familia.

-Parte de las instantáneas de este proyecto ilustran el calendario de la Diputación de este año.

-Todo surgió a raíz de conocer que le habían otorgado el premio de Tierras de Zamora a los pastores trashumantes que yo conozco, un premio muy merecido porque siguen una tradición que hay que conservar, algo complicado en los tiempos actuales debido al estado de los caminos y a la desaparición de las cañadas. Una parte del trabajo se lo mostré a la Diputación, dado que yo estoy documentado la trashumancia, y les interesó. Es un proyecto personal que persigue dar a conocer la labor que realizan los pastores trashumantes que conservan la esencia de un oficio.

-Y ¿cómo surgió la muestra?

-A raíz del calendario nacieron muchas propuestas. Inicialmente pensamos en montar la exposición a finales del pasado año como anticipo del calendario, pero finalmente se ha hecho en verano pensando en los turistas. Además forma parte de "Pastores" que engloba una serie de actividades que ha puesto en marcha alrededor de esta temática. "Nómadas. Trashumantes de Aliste" la integran 33 fotografía y una gran panorámica.

-Las fotos en el calendario son en color y en la muestra en blanco y negro. ¿Por qué?

-La fotografía para mí es un lenguaje y el blanco y negro cuenta el mensaje de una manera más clara. El color interfiere en el mensaje. No quería que hubiera un foco de color que hiciera que perdieran protagonismo las ovejas.

-La Encarnación incluye una vitrina con distintos elementos vinculados con el pastoreo.

-Es un tributo al origen pastor de mi familia, muchos pertenecen a mi abuelo salvo las teleras de madera que me las han prestado. Con ello pretendo dar a conocer los instrumentos que utilizan y otros elementos vinculados con el mundo de la oveja como un huso, dado que una de las ganancias corresponde a la venta de la lana.

-La exposición concluye con el presente mes y luego...

-Queremos que viaje fuera de la provincia para que se conozca que hay unos pastores que trashuman de una manera muy pura en Zamora. También queremos que se pueda ver en pueblos de la provincia, pero carecemos de fechas.

-¿Las fotografías van a divulgarse de alguna otra manera?

-Queremos que el proyecto vea la luz en un libro que ya está bastante avanzado.

-A título personal ¿qué le está reportando ese trabajo?

-Con estos pastores he crecido como persona puesto que lo que tienen lo comparten, algo que no es habitual en la sociedad actual.