La supresión de la bonificación del 90% en el IBI para los terrenos urbanos de uso agrícola, ganadero o forestal afectará, según se calculó desde el PP, José Luis González Prada, a un total de 1.200 fincas zamoranas. El portavoz del partido, José Luis González Prada, indicó que "muchos zamoranos titulares de esos suelos dedicados fundamentalmente a actividad agrícolas y ganaderas van a sufrir una subida del IBI que puede llegar al doble o triple de lo que estaban pagando". Una circunstancia provocada por el Ayuntamiento "que no ha considerado esta circunstancia" tras la sentencia del Tribunal Supremo de 2014, que declaró ilegal el cobro del IBI de urbana a suelos que no hubieran sido objeto de desarrollo urbanístico y que obligó a modificar la ley del Catastro para que estos suelos urbanos pasaran a tributar con IBI de rústico.

Por su parte, el concejal de Recaudación, José Carlos Calzada, indicó en primer lugar que la valoración de los suelos es una cuestión que la realiza el catastro "y no el Ayuntamiento" para recordar que el equipo de Gobierno se comprometió "a estudiar la modificación de la ordenanza a partir del año 2017 para ver la posibilidad de que a través de la bajada del tipo se pueda compensar una parte de ese pago, que beneficiaría a todos los bienes rústicos". Calzada subrayó que el PP "está enterado" de este proceso "que se inició para solucionar un problema que habían creado ellos".