El polifacético José María Pérez más conocido como "Peridis", acaba de publicar una nueva novela histórica.

-¿Cómo nace su nueva novela alrededor de la figura de Leonor Plantagenet?

-En cierta medida de una continuación de la anterior pero se pueden leer por separado La otra acaba en la plenitud del reinado de Alfonso VIII y esta acaba en las Navas de Tolosa, un momento clave en relación con el románico, del paso románico benedictino al románico cisterciense y la gran obra que realiza es el monasterio de las Huelgas e inicia la catedral de Cuenca. En el paso del siglo XII al XIII el mundo de los trovadores, de la lucha entre Castilla y León y los almohades atacando por el sur. Ella es hermana de Ricardo Corazón de León, vive desde Burgos el fracaso de la cruzada de su hermano y sigue vigente el conflicto entre Castilla y León por los castillos. Pasan tantas cosas interesantes en el mundo del arte y en la historia que juntándolas da lugar a una novela apasionante con el gran personaje de Leonor, una reina muy desconocida pero que luego tiene dos nietos que son santos, San Luis y San Fernando, y es una mujer clave en la historia de Francia y España. Pese a basarme en hechos históricos me he tomado muchas licencias en la vida íntima de los personajes

-Esta reina ha pasado un poco desapercibida en la historia.

-Nos ha podido la narrativa inglesa o los norteamericanos que han vendido la conquista del oeste como una epopeya cuando fue el exterminio de los indios.

-¿Tenemos que "vender" nuestro Medievo?

-Primero tenemos que conocerlo y luego apreciar cómo gravita sobre nosotros. Ahí están las catedrales y nuestros templos. En la novela tiene importancia la arquitectura dado que está presente la construcción del monasterio de las Huelgas y la relación de la reina con su arquitecto. Se acaba el pórtico de la Gloria y un episodio discurre en la colegiata de toro que la están construyendo.

-Peridis arquitecto, Peridis ilustrador y ahora escritor ¿Por qué?

-Porque ya soy mayor (risas). He cerrado mi estudio de arquitectura y era una pasión dormida. Si Cervantes hubiera sabido dibujar bien no hubiera escrito el Quijote, siempre quiso ser autor teatral, y escribió el Quijote cuando ya tenía una gran experiencia de la vida. En mi caso voy a escribir contando lo que explicaba en la serie del Románico, pero de la vida. Una novela es una arquitectura de la vida y lo que trato ahora es de recrear aquella vida que tenían aquellas gentes que encargaron las catedrales, los monasterios y lucharon para tener la España que tenemos hoy.

-¿Esa escritura obedece a un fin divulgativo?

-Sí pero fundamentalmente de diversión. Mi principio es deleitar aprovechando, que la gente aprenda, igual que he hecho yo, y lo pase muy bien igual que me lo pasó yo investigando y escribiéndolo. Para entender bien una cosa es mejor dar vida unos personajes existentes y otros de ficción que ayuden a los lectores a divertirse y a aprender.

-Usted es el presidente de la Fundación Santa María La Real que ha puesto en marcha las lanzaderas de empleo.

-Las lanzaderas suponen una continuación de las escuelas taller que pusimos en marcha en el año 1985 y que han sido un proyecto internacional de gran calado. Las lanzaderas son una respuesta al desempleo en la situación actual. A un desempleado en la soledad de su casa es muy difícil que encuentre empleo y reciclarse, viene la frustración y la depresión y una situación que afecta a la familia? Si tenemos los desempleados más valiosos que hemos nunca ¿por qué no se ayudan entre ellos? Una lanzadera es un equipo de desempleados activos que se reúnen a diario para ayudarse unos a otros a encontrar empleo, no cobran pero cuentan con el apoyo de profesionales que hacen intermediación y se recualifican con un resultado extraordinario. Encuentran trabajo a lo largo de un año hasta el 60%, en Palencia hasta el 100% encontró una ocupación o montó algo.

-¿La adaptación a las nuevas maneras de búsqueda resulta fundamental ?

-Sin duda, en los últimos años ha cambiado muchos. Son fundamentales el trabajo en equipo, la innovación, economía colaborativa, el saber presentarse, la actitud proactiva y visible resulta fundamental. Lo peor del desempleo es la falta de visibilidad y la pérdida de dignidad.

-Como gran conocedor del románico. ¿El patrimonio supone una salida para esta provincia acosada por la fuga de jóvenes y la despoblación?

-Es una salida importante en Zamora y en Toro. En el caso de la provincia zamorana está posicionada en la frontera con Portugal lo que es un problema. La Raya ha matado a las provincias españolas fronterizas y a las lusas porque la conexión natural sería con el Atlántico y sin embargo se ha generado una zona interior de espaldas a la Unión Europea que ha sido nociva para ambos lados. Creo que en el patrimonio, el medioambiente y en las iniciativas que pasan por la educación y por que los titulados se queden y promuevan iniciativas representan el futuro que depende de nosotros mismos. La Fundación Santa María La Real lo está intentando en Aguilar aunque nos apoyamos en la industria galletera. Hay que fijar a los jóvenes en la tierra y sobre todo a las mujeres.

-Zamora Románica y Románico Atlántico conllevan la puesta en valor de los monumentos románicos de la capital y de la provincia.

-Pero hay que combinar la restauración con la puesta en activo. Hay que comunicar también. En ambos proyectos es clave la comunicación en poner agradable y con actividades los monumentos para atraer a turismo. Desde el punto de vista cultural, natural y gastronómico Zamora es extraordinaria pero a todo hay que meterle valor añadido y juventud

-Pero nos falta iniciativa en esta tierra para emprender.

-No es fácil, hay que ser realista. ¡Ojalá supiera de una solución! Es una situación que también afronta Teruel, una buena parte de León, Burgos u Orense. Hay un serio problema en la España interior y de una vez por todas tienen que tomar cartas en el asunto tanto las autoridades como la iniciativa privada.