El Ayuntamiento de Zamora y el Ministerio de Medio Ambiente dan los primeros pasos para la instalación de la depuradora de agua en el barrio de Carrascal, que tendrá mayores dimensiones al contar con dos tanques de depuración -frente a uno previsto en el inicio- dado que el barrio zamorano triplica su población durante los meses de verano.

La ubicación se desplaza unos metros con respecto a la parcela municipal prevista inicialmente, ya que la mayor parte del solar estaba formado por roca y su excavación para construir la depuradora resultaba más costosa que hacerlo en tierra arenosa. Por este motivo, la zona elegida se aleja unos metros y, además de abarcar la parcela del Ayuntamiento, ocupa también un terreno colindante de particulares. Esta situación obliga al Ayuntamiento de la capital a expropiar esa pequeña parte del solar privado de alrededor de 100 metros cuadrados, un proceso que se llevará a cabo "de inmediato para intentar agilizar al máximo la instalación de la nueva depuradora de Carrascal", explica el alcalde de Zamora, Francisco Guarido.

La operación pone de manifiesto "que la colaboración institucional permite acometer la solución de problemas que estaban enquistados desde hace años", exponen desde el equipo de Gobierno. El Ayuntamiento valoró en un principio dos posibles proyectos, uno que pasaba por conectar la depuradora de aguas del barrio con la red de Zamora y pueblos de alrededor y otro que implicaba la construcción de una depuradora propia para el barrio. Esta última opción, que finalmente ha resultado ser la definitiva, ha sido desde el principio la alternativa que contaba con más papeletas de salir adelante, sobre todo, debido a su menor coste economico. Guarido explicó en su momento que cualquier solución de los dos era "satisfactoria" si se tiene en cuenta que la reivindicación se retrotrae una década atrás en el tiempo después de sucesivas peticiones por parte de la Asociación de Vecinos de Carrascal.