El crecimiento económico ha generado una recuperación del empleo que, por el contrario, lo ha transformado en "más temporal y parcial". Es una de las conclusiones que extrae el Consejo Económico y Social de Castilla y León en su último informe, aprobado ayer, y cuyos datos llevan al CES a ver como necesaria "una revisión general de las reformas laborales". Ante esta panorama, Zamora es una de las tres provincias de Castilla y León más alejada de la renta bruta europea, con un porcentaje del 75%, 25 puntos por debajo de la media europea. El informe es un diagnóstico compartido por sindicatos, empresarios y sociedad civil de la comunidad autónoma. Zamora es una de las tres provincias de Castilla y León, que experimentaron reducciones en el número de autónomos. Las más remarcadas fueron las provincias de Palencia y Soria, si bien Zamora también consignó una merma más intensa que la media regional, del 1,3%.

Convergencia. El Producto Interior Bruto (PIB) per cápita de los zamoranos, lejos de acercarse, se aleja cada año más desde 2009 de la media de la Unión Europea. El informe del CES refleja que, en paridad de poder de compra, la renta de los zamoranos es un 25% inferior a la media europea, solo con Salamanca y Ávila con datos aún peores. No obstante y, a pesar de ello, si se toman como punto de partida los valores del año 2000, Zamora es la provincia que más ha mejorado, dado que partió de una situación muy negativa, al 67%.

Precios. Todas las provincias presentan variaciones anuales negativas en su IPC. Zamora presenta una de las tasas más equilibradas, con un -0,7%, frente a decrecimientos más intensos como los experimentados por Ávila, con un -1,4%, o León y Salamanca, con un -1,4 y -1,3%, respectivamente.

Empleo. En lo que se refiere a la evolución de las tasas de empleo, Zamora registra un crecimiento de 2,1% frente a descensos como los de Burgos, Segovia o Soria. El informe hace mención a la tasa de actividad y solo Segovia se sitúa por encima de la media nacional, aunque muy de cerca de ella. Por debajo de ese nivel, pero sobre la tasa media regional, se situaron Burgos, Valladolid, Soria y Palencia. El batacazo regional se lo pega Zamora, que adoptó en el último año una de las menores tasas de Castilla y León, con un 51,3%.

Autónomos. Zamora ha perdido en el último año 242 autónomos, según el informe del CES. La tendencia es general en todas las provincias de Castilla y León, que experimentaron reducciones en el número de autónomos. Las más remarcadas fueron las provincias de Palencia y Soria, si bien Zamora también consignó una merma más intensa que la media regional, del 1,3%.

Exportaciones. Frente a los excelentes resultados de las ventas exteriores de la región, entre las tasas más bajas despunta Zamora, con apenas un 4,1%. Mientras tanto, el comportamiento provincial de las importaciones no ha sido homogéneo en 2015. Aunque la mayor parte de las provincias registran crecimientos en sus compras al exterior, Zamora presentan una tasa negativa del 13,7%. La importante caída radica en los significativos descensos de las importaciones de animales vivos y productos del reino animal y vegetal, industrias alimenticias y material eléctrico, que no se han podido compensar con el crecimiento de las importaciones de materias plásticas y sus manufacturas.

Despoblación. La mortalidad es la nota dominante en el análisis demográfico de la provincia zamorana. La menor incidencia de la inmigración extranjera, junto a los saldos negativos que afectan a la población, promueve un continuado proceso de envejecimiento, el más alto de la región. Más de 2.600 defunciones frente a los apenas 1.000 nacimientos convierten a Zamora en la provincia con el saldo natural más alto, pero por la cola.

Infraestructuras. En cuanto a las licitaciones más importantes del Ministerio de Fomento en Castilla y León, Zamora figura entre ellas no tanto por el montante económico en muchos casi, sino por su relevancia en sí misma. En la ristra de inversiones en Alta Velocidad figuran varias actuaciones en la línea Olmedo-Zamora-Orense. Las obras del tramo Benavente-Zamora, que se iniciaron en el verano de 2013 con un presupuesto de 179 millones de euros, también figuran como un logro al suponer «una conducción más cómoda y segura que el tránsito actual por la carretera N-630 y una disminución de los tiempos de recorrido entre Benavente y Zamora de aproximadamente 15 minutos». A los vecinos de localidades como Barcial del Barco, Villaveza del Agua, Santovenia, Granja de Moreruela, Riego del Camino, Fontanillas de Castro y Montamarta les evitará soportar el paso de «hasta 8.000 vehículos que de media circulan diariamente por las travesías de estas población».