Impresionados por todos los tesoros que esconde la pequeña iglesia románica del barrio de Olivares, un grupo de ocho alumnos de 4º de la ESO y 1º de Bachillerato del instituto La Vaguada eligió el templo de San Claudio para elaborar un minucioso trabajo que presentaron al concurso escolar Patrimonio Joven de Futuro, puesto en marcha por las fundaciones Villalar y Santa María la Real, con el mejor de los resultados: lograr el primer premio.

De la mano de las profesoras María Ángeles Matellán Prieto, de Artes Plásticas, y Magdalena Costa Martín, de Lengua, se embarcaron en un ambicioso proyecto para el que tuvieron que rascar horas a su tiempo libre durante apenas tres meses.

"Elegimos esta iglesia porque nos llamaba mucho la atención, ya que está bastante escondida, junto al río, en vez de en el casco antiguo como el resto de templos románicos. Pero tiene elementos muy llamativos", apunta Alba Esteban sobre la elección de la iglesia que protagoniza su proyecto.

"Lo primero que hicimos fue informarnos en el Archivo Diocesano, donde nos enseñaron muchos documentos pertenecientes a la iglesia, desde partidas de bautismo hasta actas de matrimonio y todos los registros que desarrollaban los sacerdotes", enumera su compañera Noelia Ferrero. El trabajo de documentación se completó con una visita a la biblioteca, donde tuvieron acceso a todos los libros que tratan diferentes aspectos de esta joya zamorana de finales del siglo XI.

El grupo continuó después con el trabajo de campo, acudiendo al propio templo para tomar fotografías de varios detalles y elaborar un vídeo de presentación para el concurso, donde los alumnos apuntaban algunos de los rasgos más característicos de la iglesia, como el original mesario, "que son más que simples esculturas en piedra. Se trata de un calendario con doce imágenes que representan aspectos típicos de cada mes, desde gente segando cereal hasta personas elaborando vino o comiendo en invierno junto a la lumbre", valora Alba Esteban.

La tercera y última fase fue la de recopilación de toda esa información para darle forma y ofrecer un completo resumen tanto de la historia de la iglesia hasta de los detalles de su arquitectura con su simbología y el gran valor artístico e histórico que atesora, acompañando todo ello con dibujos de gran detalle sobre sus elementos fundamentales.

Como colofón, los estudiantes optaron por traducir este estudio a otros idiomas, como el inglés, el francés y el alemán, que adjuntaron al trabajo final, también encuadernados. El objetivo era que pudiera servir a nivel turístico. "Debido a esta era de la globalización, así hacíamos esta información accesible a más gente. Lo pensamos como una inversión de futuro, para que turistas de otros países se pudieran beneficiar de este trabajo y dar así a conocer más esta iglesia", explica Noelia Ferrero.

Marta Montes Blanco, Óscar Río Río, Sandra Felipe Mariano, Noelia Ferrero Martín, Marina Álvarez Rodríguez, Jorge Casado Domínguez, Alba Esteban Bruña y Nazaret Martín Rafael acudían hace unos días junto con sus profesoras al acto de entrega de premios en las Cortes Valladolid, sin saber que iban a ser los afortunados. El jurado de este certamen, que celebraba su primera edición tras tomar el relevo del célebre concurso escolar Los Nueve Secretos, elegía el trabajo de los zamoranos como el más destacado de la treintena de propuestas presentadas por alumnos de institutos de todo Castilla y León.

Ahora los ganadores zamoranos cuentan los días para, una vez finalizados sus exámenes en el instituto, disfrutar del premio: un intenso viaje de cinco días por el norte de Portugal, que les llevará a recorrer a comienzos del próximo mes el país vecino desde Braganza hasta Oporto.