La fiscal pidió tres años y medio de cárcel y la acusación particular seis años de prisión para la pareja formada por L.D.P. y el ciudadano extranjero J.R.S.C., acusada de apropiación indebida por haberse quedado con 152.000 euros procedentes de 43 operaciones de reintegro y transferencia bancaria que la tía de ella realizó entre julio de 2009 y enero de 2011 sacando el dinero de la cuenta común que tenía con su marido, casado con ella en segundas nupcias. Fiscalía y acusación sostuvieron en el juicio celebrado en la Audiencia Provincial que la pareja indujo a la tía de ella a que sacara sucesivas cantidades de dinero de varias cuentas bancarias, abiertas en el BBVA, el Banco Sabadell y Caja España Duero que iban a parar a cartillas a nombre de la chica, su compañero y una hija menor de ambos.

La pareja declaró que tanto la tía como su marido les ofrecieron ayudarles para abrir un bar del que se ocupaba la sobrina, que era camarera de profesión, mientras su pareja cuidaba de la casa y los niños (tenían dos en común más una de ella de una relación anterior). El primer bar que cogió fue mal, y lo mismo pasó con un segundo, por lo que la tía se ofreció a ayudarle con esas cantidades de las que el marido, cotitular de las cuentas bancarias, era conocedor.

Según el fiscal y la acusación particular la sobrina influyó sobre su tía, casi ciega (trabajaba para la ONCE) y sordomuda (se comunicaba con dificultad) para acompañarla al banco y obtener las sumas de dinero. El marido de la tía, que se había casado con ella tras enviudar y era padre de tres hijos de su anterior esposa, tenía en esas cuentas bancarias el fruto del trabajo de toda su vida laboral en Alemania, además de la pensión que cobraba de aquel país. Según las acusaciones fue a raíz de la enfermedad de la tía, cuando esta propone a una hija que no puede seguir cuidando del marido y que lo meta en una residencia, cuando los hijos revisan las cuentas y comprueban que estaban prácticamente a cero, excepto una con 16.000 euros, que se apresuraron a retirar. Después presentaron una denuncia contra la tía, la sobrina y su pareja. Si bien en el tiempo transcurrido hasta el juicio han fallecido tanto la tía como su esposo. La fiscal pide además que devuelvan 70.000 euros y la acusación particular 152.000, y el pago de una multa de 4.500 euros.