Fin a una década de espera. Los 178 aspirantes que presentaron su solicitud para entrar en la Cofradía de Jesús Nazareno en el año 2006 estaban citados para cumplimentar ayer en la sede de la hermandad de la calle Viriato el proceso administrativo de alta y el próximo jueves, día 19, en la iglesia de San Juan, celebrarán el rito religioso de entrada en la Congregación. Al final han fallado en torno a una treintena, algo habitual en estos casos, aunque incluso esta vez ha fallado menos gente que en otras ocasiones. Es el problema que tienen las prolongadas listas de espera, que cuando llega el turno, a muchos aspirantes se les ha pasado ya el interés por entrar en la hermandad. Al final han sido cerca de 150 los hermanos que han formalizado el ingreso, y a ellos se unirá alguno más a lo largo de la semana, ya que por distintos motivos le era imposible asistir ayer a la cita.

Habrá un segundo turno de altas, que corresponden a las 183 solicitudes formalizadas dentro del año 2007. En este caso el proceso administrativo del alta será el día 21, sábado, a las 16.30 horas en la Sede Social de la calle Viriato y el rito de entrada está previsto para el día 26, jueves, a las 20.30 horas en la iglesia de San Juan.

La junta directiva de la Cofradía tomó la decisión en abril de admitir como nuevos hermanos a 362 aspirantes, completando así los 361 que causaron alta un par de meses antes. Han entrado los aspirantes que tenían desde el número 3.577 al 3939.

La notoria escasa asistencia de hermanos a la procesión de la Madrugada del Viernes Santo es una de las razones fundamentales por las cuales la directiva decidió abrir el cupo de nuevos hermanos, ya que era un contrasentido que las filas de la procesión se resientan por falta de cofrades y a la vez haya 1.600 personas que quieren entrar en lista de espera.

La directiva decidió abrir la lista "de forma paulatina, dando entrada cada año a un número considerable de hermanos, hasta cancelarla completamente, ya que las personas que esperan su turno para entrar en la cofradía, al ser un número tan abultado de años de espera", cuando les llega la hora ya han perdido el interés.