El expropietario de la inmobiliaria Remesal y Salas tiene pendientes de ejecutar otras dos sentencias de la Audiencia Provincial: la más reciente, dictada el pasado mes, le condena a año y medio de cárcel por apropiarse de 42.196 euros recibidos para comprar garajes en junio de 2011; y la otra, dictada en julio de 2015, le impone cuatro años de prisión por apropiarse de 40.000 euros procedentes de la venta del apartamento de una mujer en Torrevieja. En este último caso, se comprometió a destinar ese dinero adquirir un apartamento en Fray Toribio de Motolimia, número 7, pero la mujer se quedó sin su vivienda y sin el dinero, que espera percibir desde 2013. La sentencia de la Audiencia Provincial está pendiente de la decisión del Tribunal Supremo, que estudió el asunto el 18 de abril pasado.

El exdueño de la inmobiliaria ha recurrido ante el Supremo también la sentencia del caso en el que un empleado de banca y amigo se quedó sin 42.196 euros con los que iba a participar al 50% en un negocio de compra de siete garajes en el edificio de Los Momos. De la resolución de los recursos presentados ante el Supremo depende que el procesado tenga que cumplir íntegras las penas.