La creadora autodidacta Lorena Paniagua, que firma sus obras como Atika, presenta veinte obras de gran formato en Alhóndiga.

-¿Cómo empezó en el mundo del arte?

-En mi casa siempre he visto hacer cosas a mi padre y le cogí materiales para hacer un cuadro con madera cuando yo tenía unos 17 años. Luego poco a poco fui haciendo otros, pensado cómo hacerlos y fui evolucionando hasta realizar las obras que ahora se pueden ver en la Alhóndiga donde utilizo desde maderas, piedra, arena o trocitos de arena.

-Sus cuadros son muy complejos.

-Son obras que requieren muchas horas y ahora que estoy en paro dispongo de más tiempo para poder dedicarlo. Además ahora me he traslado a un pueblo y puedo trabajar mejor porque corto yo misma las maderas, puesto que mi padre me ha enseñado a manejar bien la sierra. Actualmente hago yo todo el proceso.

-¿Por qué elige unos tamaños tan grandes?

-Realmente porque me parecería que era una manera de ser original con mis obras. Además creo que este tipo de obra tan grande no es fácil de encontrar y es un elemento decorativo que puede situarse encima de un sofá, por ejemplo. Comencé con otros formatos, pero he ido evolucionado hacia un cuadro integrado por varias piezas. Yo comencé con obra mucho más pequeñas, pero en una exposición que hice en un bar de Salamanca un chico me pidió una obra del estilo pero mucho más grande, me pidió una de tres metros, y a partir de ahí adopté este tamaño.

-En sus obras utiliza múltiples elementos.

-La base prácticamente es madera. En algunos cuadros son láminas de armarios o bien maderas recicladas de muebles o armarios que se van a tirar. Posteriormente como suelen tener imperfecciones los lijo, les hecho base con arena. También uso masilla con cola para pegar las piedras, las telas o arena que traigo cuando voy a la playa, como la que me traje de cuando fui a Canarias que he empleado en muchas obras.

-Esta es su primera exposición en una sala, ¿qué le impulsa a mostrar ahora su creación?

-Con anterioridad he presentado mis creaciones en distintos bares de varias ciudades. Para lanzarme a hacer una exposición de cuadros tan grandes se precisa de mucho tiempo. Ahora me he lanzado a preparar cuadros y hasta ahora no he expuesto en una sala porque no tenía material suficiente ni tiempo para prepararlas porque trabajaba. Al final expongo veinte cuadros que son muy laboriosos.

-¿Por qué en Zamora?

-Expongo en esta ciudad pese a que soy extremeña porque una amiga mía reside en Zamora. Ella me ha animado a dar el paso porque a mí esta vertiente artística me da felicidad. Yo he trabajado en la hostelería y en tiendas pero si esto me diera para vivir sería mucho más feliz. Cuando cuelgo un cuadro que gusta al público o entrego una obra que me han encargado y a la persona le gusta, soy realmente feliz. El arte me reporta mucho.

-Firma como Atika, ¿por qué?

-Tuve una gatita que se llamaba Atika, la quería mucho y me encantaba ese nombre por lo que tomé para mi vertiente creativa.