El responsable de un club de alterne, ubicado en Alcañices, se enfrenta a dos años de prisión, tras ser imputado por la Fiscalía Provincial en un delito contra los derechos de los trabajadores, al no tener dadas de alta en la Seguridad Social a 13 mujeres de las que "se comprueba que están trabajando" en ese local, de acuerdo con la denuncia.

Además, la Fiscalía exige a la Audiencia Provincial, que juzgará el caso el día 23 de mayo, que se imponga al imputado, cuyo nombre responde a las iniciales de J.A.G.M., una multa de 3.000 euros por el delito de que se le responsabiliza. Asimismo, se solicita que tanto el procesado como la empresa indemnicen a la Seguridad Social con las cuantías que la Tesorería dejó de ingresar como consecuencia del supuesto fraude que habrían cometido, por el que se multó al titular del negocio, sanción contra la que este no interpuso alegaciones ni recurrió.

Por otro lado, de las 13 mujeres que se encontraban en el club, tres de ellas eran extranjeras y carecían de permiso de residencia y trabajo, con lo que si estancia en España era irregular, lo que motivó que la Inspección de Trabajo sancionara a la empresa con un total de 30.000 euros, según ha podido saber este diario.

El mismo organismo elaboró un acta de sanción, que no fue recurrida por los dueños del establecimiento, como se ha indicado, por no haber dado de alta en la Seguridad Social a las empleadas, que se materializó en una sanción administrativa de 21.882 euros.

El Juzgado número 4 de Zamora capital abrió en 2014 un procedimiento contra "el gerente o el jefe" del club de alterne, situado en la carretera de San Vitero, en el número 3, tras la denuncia cursada por la Inspección de Trabajo de la provincia, que efectuó una inspección el 21 de marzo de 2013 y comprobó cómo las mujeres "que están trabajando" en el local no estaban registradas en el Régimen General de la Seguridad Social.

En el momento en el que se giró la visita de la Inspección, se encontraban 13 mujeres en el club, que "da ocupación a numerosas chicas, que ejercen su trabajo como chicas de alterne", según consta en el escrito de acusación de la Fiscalía Provincial.

La Inspección de Trabajo comprobó, al cotejar datos, que el propietario del establecimiento solo tenía dados de alta a tres trabajadores, que sumados a las mujeres que allí desempeñan su actividad de alterne, según consta en el acta levantada por el citado organismo, elevarían la plantilla a un total a 16 personas. En el juicio que se celebrará el día 24 testificarán una funcionaria de la Tesorería, el subinspector de la Seguridad Social y tres policías nacionales.