"¿Cómo siendo una persona ciega, discapacitada, puede ser alcalde?". "Los ciegos son unos inútiles, no sirven para nada", por lo que "lo único que tenían que hacer es estar en casa". "¿Cómo el Ayuntamiento de Rabanales le permite ir a las sesiones?, que no se entera de nada". A estas graves vejaciones, a esta marginación y la burla pública por su grave discapacidad visual ha tenido que hacer frente el alcalde pedáneo del PP en Mellanes de Aliste, José Cruz Mateos, quien confía en que la justicia ponga freno al acoso al que se está siendo sometido por un vecino, de iniciales D.J.F.L.S., quien se enfrenta a una querella por cuatro delitos.

El regidor ha tenido que soportar, según la denuncia, el talante agresivo, las amenazas, las humillaciones del investigado, que ha llegado a instarle a que abandone el pueblo e increparle al terminar algún pleno y reuniones de vecinos. Todo ello le ha llevado a padecer "crisis de ansiedad", por la que tuvo que ser atendido y seguir un tratamiento médico, con una atención continuada.

Uno de estos episodios tuvo lugar cuando el querellado -ya condenado en dos ocasiones por amenazas- se aproximó al alcalde pedáneo, "delante de todos los vecinos, moviéndose de un lado para otro y agachándose para "ver" si le podía seguir con la vista", gestos "humillantes" y de "burla" a los que D.J.F.L.S. añadía las siguientes manifestaciones: "a ver si ves lo que verdaderamente dices o es que nos estás engañando a todos". La sucesión de agravios, que también ha extendido al colectivo de la ONCE, según consta en la querella, ha sido constante para poner en cuestión la capacidad intelectual de la presunta víctima. Al final de un concejo para repartir trabajos en el pueblo, llegó a espetarle que "viendo lo que tú ves, no eres capaz de hacer lo que dices en el Ayuntamiento".

Cuando un vecino le recriminó al denunciado esa actitud, este espetó que "los ciegos son unos inútiles, que no sirven para desarrollar estos trabajos".

Y mientras emitía esas descalificaciones, el acusado "cada vez se acercaba más al regidor de Mellanes, "situándose a unos 20 centímetros, llegando a notar el aliento en su cara", describe la querella, y "si le estuviera agarrando", mientras le decía "que era un desgraciado", "que no tenía dónde caerse muerto", "que su familia y él mismo, mejor buscaran una casa", "que no teníamos dónde vivir en el pueblo" y "que me marchara del pueblo y que lo que tenía que hacer es quedarme sentado a la puerta de casa". El alcalde le replicó que no entendía cómo "en los tiempos en los que estamos", podía decirle "todas esas barbaridades", a pesar de lo que el vecino no cesó en su conducta.

Esta persecución se repite desde que tuvo lugar la toma de posesión de la actual corporación municipal de Rabanales, presidida por el candidato del PP, el 13 de junio de 2015, indica la querella, cuando ya el denunciado se dirigió, al final de la sesión, al nuevo alcalde para decirle "a ver tú, Judas, a quién vas a poner ahora de alcalde de Mellanes".

A este vecino se sumó otra mujer, también con antecedentes por amenazas, que espetó en ese mismo momento "¿qué pasa, que ahora vais a escribir las sesiones en braille, porque el ciego ese no sé cómo va a enterarse de nada?", según recoge en la querella, en la que ya ha declarado el denunciado para negar haber pronunciado una sola esas palabras.

El juez que investiga los hechos deberá decidir si el denunciado ha cometido delitos contra la integridad moral del alcalde pedáneo; de falta de respeto y consideración a la autoridad, puesto que le increpa por su condición de regidor; de un delito contra la intimidad y el derecho a la propia imagen; y otro contra el ejercicio de los derechos fundamentales y libertades públicas.