Los alcaldes y representantes de los municipios que acogieron festejos taurinos mayores durante el año pasado se han reunido esta mañana con el delegado de la Junta de Castilla y León de cara a la temporada taurina que ya ha comenzado. Alberto Castro señaló que "la obligación de todos los organizadores es garantizar la seguridad durante los festejos" y, en esta línea, apostilló que "se inician muchos expedientes sancionadores" por no cumplir los requisitos inherentes a este tipo de festejos, ya sean mayores o populares. Las multas pueden llegar hasta los 24.000 euros, aseguró el delegado. "Se abren muchos expedientes a lo largo del año", indicó el delegado, hasta el punto de que todavía se están gestionando algunas de las incidencias registradas durante el año pasado.

Alberto Castro aprovechó la reunión para recordar que los espectáculos taurinos son "un motor económico y uno de los máximos exponentes de nuestra identidad cultural, hasta el punto de que muchos pueblos no entenderían sus fiestas sin los festejos taurinos". Por lo demás, la reunión sirvió para analizar los cambios de reglamentación que permitan a los funcionarios de los ayuntamientos ejercer de delegados de autoridad en los espectáculos taurinos, labor que habitualmente ocupan efectivos de la Guardia Civil. En Toro, Benavente y Zamora capital esta función es habitualmente asumida por la Policía Municipal.