La tradicional manifestación laboral del Primero de Mayo, que este año también saldrá del barrio de San José Obrero -plaza de La Encomienda, a las doce del mediodía-, centrará sus reivindicaciones en la erradicación de la "pobreza salarial y la recuperación de los derechos sociales perdidos durante la crisis". La marcha, convocada por los dos sindicatos mayoritarios, UGT y CC OO, contará además con la presencia de otros colectivos y recorrerá las calles comprendidas entre la plaza de La Encomienda y la Plaza Mayor, donde finalizará con la lectura del manifiesto por parte de los convocantes.

Los sindicatos apuntan que "la última reforma laboral ha llevado a nuestro país a una situación de pobreza salarial y pérdida de derechos sociales que recuerdan a épocas que estaban ya superadas". En esta línea, los convocantes insistirán en la precariedad de los salarios y particularmente de los nuevos contratos, que provoca que "el consumo se estanque y no se genere riqueza ni desarrollo y que la Seguridad Social recaude cada vez menos y para cumplir con sus obligaciones tenga que recurrir a los fondos de reserva". En las líneas reivindicativas anunciadas por UGT se incluye el hecho de que "las pensiones están cada vez más devaluadas, que los jóvenes tengan que emigrar para encontrar un empleo, que los parados de larga duración no encuentren una ocupación, que las mujeres sigan obteniendo menos puestos de trabajo y que, en definitiva, seamos más pobres". Al mismo tiempo, indican, "una élite económica y social se sigue enriqueciendo, favorecida por la reducción de sus impuestos".