Tres incendios en seis años y todos provocados. Las llamas calcinaban su casa de Venialbo la madrugada del 16 de agosto de 2009. Cuando el matrimonio propietario de l vivienda regresaba a las tres de la madrugada de disfrutar de las fiestas se encontró con el fuego. La pareja y su hija de seis años se quedó en la calle, ayudado desde entonces por las instituciones para sobrevivir.
A la traumática experiencia, que impide a la hija quedarse sola por temor a que vuelva a producirse un fuego, se sumaron otras dos: en 2014, el vehículo de la familia fue pasto de las llamas a la puerta de su domicilio; y, el año pasado, la furgoneta utilizada para el trabajo, estacionada en el mismo lugar, fue arrasada por el fuego.
Desde entonces, la pareja afirma que vive traumatizada y con "detectores de incendios" en las distintas viviendas que ha ocupado. Los perjudicados aseguran que los autores de los sucesivos fuegos les "han arruinado la vida", al despojarles de sus propiedades. De hecho, han tenido que ir reparando la vivienda, todavía en fase de construcción, poco a poco, con la ayuda de los tres hijos mayores.
Los tres episodios han dejado al matrimonio en "un estado de necesidad, viviendo actualmente auxiliado por las ayudas de los servicios sociales de Cáritas, del Ayuntamiento y de la Iglesia". Las consecuencias no han sido solo materiales, sino también psicológicas, una vez que los especialistas en investigar incendios de la Guardia Civil, llegados desde León, les informaron de que el primer fuego fue provocado, al detectar tres focos de iniciación sin conexión coherente entre sí, con sustancias combustibles arrojadas desde fuera de la casa.
Su hija, que tenía seis años cuando el fuego destruyó su casa, tuvo problemas en el colegio y "arrastra un gran miedo a quedarse sola en el domicilio", secuelas que detectaron sus profesores también en el rendimiento escolar. La pequeña tuvo que repetir curso en 2009-2010 por esta causa, explica el afectado en la denuncia interpuesta ante la Guardia Civil. Esas secuelas psicológicas se vieron incrementadas por los posteriores incendios del vehículo familiar y la furgoneta con la que trabajaba el denunciante.
Arresto y denuncia
El matrimonio denuncia ahora los siniestros, tras comunicarle la Guardia Civil la detención de tres individuos, residentes en Zamora, como autores de siete incendios en la comarca de Tierra del Vino, algunos de ellos ocurridos en su pueblo, en Venialbo. A dos de los apresados se les investiga como autores materiales de los siete incendios y a un tercero como posible autor intelectual e inductor de los delitos ocurridos desde 2009.
Precisamente, la actuación policial comenzó con el fuego que sufrió la casa familiar del denunciante la madrugada del 16 de agosto de 2009, que sofocaron los bomberos de Toro.
