La mitad de la provincia dispone ya de acceso a la receta electrónica, una modalidad que permite a los pacientes crónicos surtirse de medicamentos sin necesidad de acudir a la consulta del médico. Concretamente Zamora tiene ya receta electrónica en trece zonas básicas de salud, más de la mitad de las 22 existentes, si bien la implantación culminará en junio con los cuatro centros de salud de la capital, que son los que mayor número de cartillas acumulan en la provincia. Así, mientras que más de la mitad de las zonas básicas de salud tienen ya receta electrónica todavía no llegan al 50% los pacientes de Zamora que pueden utilizarla. Concretamente ha llegado hasta ahora a 75.512 usuarios de tarjetas sanitarias, que pueden utilizar los servicios de 92 oficinas de farmacia. De hecho, ya se han distribuido 127.270 fármacos por este sistema, según los datos de la Consejería de Sanidad facilitados por la agencia Ical.

La implantación de la receta electrónica en Castilla y León está avanzando en los últimos meses sin que se haya registrado "ninguna incidencia" importante, tal y como coinciden en señalar la Consejería de Sanidad y el Colegio de Farmacéuticos. El proceso comenzó en las zonas rurales y se irá extendiendo a toda la región hasta el verano. La receta electrónica permitirá reducir las visitas al médico, mejorar el control sobre la adherencia y posología y evitar errores asociados a la prescripción manual, según informó a Ical el director general de Investigación, Innovación e Infraestructuras, Rafael Sánchez. Además, se trabaja en paralelo en el proyecto de interoperabilidad de la tarjeta sanitaria, con el objetivo de que en julio se sume al programa del Ministerio de Sanidad. Castilla y León es la comunidad que más retraso lleva con la receta electrónica.