El Pleno sobre el proyecto de ordenación del territorio celebrado en la Diputación se convirtió, de facto, en un debate sobre la utilidad de las diputaciones provinciales. La portavoz de Izquierda Unida en la Diputación, Laura Rivera, señaló al PP por "aprovechar el acuerdo para meter de refilón la defensa de las diputaciones" (el Pleno debatía un acuerdo para pedir a la Junta que, salvo por lo relativo a la sanidad, Cañizal y Vallesa sigan formando parte a todos los efectos administrativos de la provincia de Zamora). El texto aprobado con los votos a favor de PP, PSOE y Ciudadanos y la abstención de IU indica que "estos municipios se verían afectados a la hora de acceder a subvenciones para la ejecución de obras financiadas con cargo al plan municipal de obra o a todos los planes futuros de inversiones en los municipios de la provincia" por parte de la Diputación.

La discrepancia entre PP e IU se fundamenta, principalmente, en una frase contenida en el acuerdo, que dice textualmente se debe "acudir a las instituciones intermediarias existentes, las diputaciones provinciales, en vez de optar por la creación de nuevas figuras organizativas". Aunque Rivera se mostró de acuerdo con los puntos fundamentales del acuerdo aseguró que "no podemos votar esto" porque "IU defiende la supresión de las diputaciones". La portavoz de IU acusó al equipo de Mayte Martín Pozo de "defender las diputaciones y no los intereses de los ayuntamientos".

Juan Dúo recogió el guante y aseguró que Rivera "envuelve las cosas" y "busca enfrentamientos entre Junta y Diputación cuando no los hay". Además, el vicepresidente argumentó que "defendemos los intereses de los ayuntamientos y de los zamoranos".

Por lo demás, y también con todos los votos a favor salvo los de Izquierda Unida, el Pleno aprobó la modificación presupuestaria para dotar de 1,5 millones de euros al plan para contratar a 500 desempleados zamoranos, que realizarán diversas obras en los pueblos. Laura Rivera justificó la abstención de su grupo en que "el empleo que se crea no es digno y el plan no resuelve los problemas de los pueblos". Por su parte, el socialista Antonio Plaza, aunque votó a favor "porque lo haremos con cualquier iniciativa que saque del paro a una persona", apostilló que el plan "no es ambicioso pues es igual que el del año pasado, es un modelo agotado". Sobre este punto, el popular Aurelio Tomás quiso añadir que "lo que hacemos es luchar por la provincia" aunque reconoció que "la Diputación tiene los recursos que tiene" añadió que "los planes de empleo no son de nuestra competencia y aún así lo hacemos. No es empleo estable, pero da la posibilidad de que algunas personas trabajen durante algún tiempo".